El consorcio para la gestión del ciclo urbano del agua del río Louro, con sede en la Estación Depuradora de Aguas (EDAR) de Guillarei (Tui), celebró ayer la reunión constitutiva de este primer organismo gallego, surgido de una cooperación supramunicipal, destinada a la gestión del saneamiento, abastecimiento de aguas y depuración. Servirá a los 58.918 habitantes de los municipios de Tui, Salceda de Caselas, Porriño y Mos, Concellos que en 1994 firmaron, junto con el Estado, un acuerdo para sanear la cuenca del río Louro.
La presidencia del comité directivo del consorcio recae durante los dos próximos años en el director de Augas de Galicia, Francisco Menéndez. La vicepresidencia corresponde a Nelson Santos, alcalde del Concello de O Porriño, con el mayor número de habitantes. El resto de miembros son la alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo; el alcalde de Tui, Moisés Rodríguez; y el regidor nacionalista de Salceda de Caselas, Marcos Besada. La vicepresidencia será rotatoria, de acuerdo con el número de habitantes de cada Concello.
La Xunta de Galicia apuesta por compartir servicios entre municipios con fórmulas de colaboración como ésta, motivo por el que el proceso de este consorcio se considera un modelo a seguir. Será el que gestione directamente los ingresos por los servicios del agua, lo que evitará problemas por deudas o reparto de costes.
La prestación del servicio integral implica la garantía ambiental para el río Louro, no sólo con la gestión de saneamiento, sino con un sistema de inspección más riguroso de los vertidos de las industrias. Se incluye el servicio de depuración de la EDAR de Guillarei y se garantiza la sostenibilidad económica, financiera e institucional en la gestión.
La Xunta, que ya lleva invertidos 14,5 millones de euros en saneamiento secundario, permanecerá en el consorcio para garantizar la sostenibilidad institucional y económica, hasta su autofinanciamiento. Las primeras actuaciones adminsitrativas en los próximos meses, con previsión de funcionamiento efectivo el 1 de julio de este año, son: aprobación del presupuesto, firma de convenio entre la Xunta de Galicia y el Consorcio para la regulación de la colaboración financiera y técnica; aprobación de la ordenanza fiscal única para todo el ámbito territorial, redacción de los reglamentos de explotación del servicio, de conexión a la red de alcantarillado, de la ordenanza de vertidos y de las normativas técnicas únicas. Finalmente se realizará la licitación y adjudicación del contrato de gestión de servicio público por el consorcio.
