El 787 aniversario de la dedicación al culto de la catedral de Tui no pasará desapercibido. El próximo sábado, día 1 de diciembre, a las 12 horas, el obispo de la diócesis de Tui-Vigo, monseñor Luis Quinteiro Fiuza, presidirá la ceremonia litúrgica que conmemorará esta efemérides. Están invitados a asistir al oficio religioso el cabildo catedralicio, el clero diocesano y los fieles. Posteriormente está prevista una reunión capitular.

La catedral tudense, monumento enseña de la ciudad fronteriza, que en su historia acogió acontecimientos como la abolición del tribunal de la Inquisición el 23 de mayo de 1813, comenzó a edificarse en una fecha sin concretar aunque, como informa el canónigo archivero Avelino Bouzón Gallego, "los documentos conservados en el archivo capitular atestiguan que el obispo Esteban Egea remató la obra del templo y presidió la ceremonia de consagración el 30 de noviembre de 1225, fiesta de San Andrés". El mismo obispo ordenó "perpetuar la celebración de la dedicación el día primero de diciembre, ya que no era procedente hacer la conmemoración el día reservado al apóstol que murió clavado en la cruz en forma de aspa", explica Bouzón.

San Andrés está significado de forma singular en el templo catedralicio. Dos siglos después de su inauguración, entre los años 1415 y 1465, el obispo Juan Fernández de Sotomayor ordenó levantar la torre del homenaje dedicada al santo. La imagen del apóstol está desde entonces en el muro exterior de la torre, debajo de la esfera del reloj, en memoria del día de la dedicación del templo.

El prelado Juan Manuel Rodríguez Castañón, en el año 1767, reordenó el espacio de la planta principal de la torre para destinarla a capilla del Santísimo Sacramento. Encargó la creación del retablo rococó al tallista redondelano Francisco Fontela, que concentró en la Eucaristía la temática iconológica de la obra. En la hornacina central destaca la imagen de San Andrés colgado de la cruz.

La catedral de Tui se construyó en planta de cruz latina, con tres naves de cuatro tramos en el brazo mayor y tres naves en el transepto, siguiendo el modelo compostelano, precisa Avelino Bouzón. Su construcción tiene una primera etapa románica (1174-1184), cuyos elementos destacan principalmente en el brazo norte del crucero.

En la segunda etapa de transición al gótico (1218-1239) se construyó la nave mayor, la nave central de bóveda de crucería y el triforio sobre las naves laterales, así como los rosetones sobre las fachadas y se protege la fachada principal con un pórtico original repleto de simbología.