El cruce de O Xuncal cuenta con paso de peatones que, en lugar de proteger a sus usuarios, los condena al riesgo de atropello. Así lo asegura el portavoz del BNG de Baiona, Xosé Enrique Fernández, que califica la señalización de "trampa mortal" para los peatones de la zona, mayoritariamente niños que toman el autobús escolar para acudir al colegio de Sabarís o al instituto Primeiro de Marzo. El nacionalista exige al gobierno municipal que habilite un paso elevado para garantizar la seguridad a los viandantes, dado que el actual se encuentra a escasos metros de un cambio de rasante y con obstáculos que impiden la visibilidad tanto a peatones como a conductores.

Fernández hizo un ruego al gobierno a finales de 2010, acompañado de 300 firmas de vecinos, principalmente padres de alumnos del colegio de Sabarís, para que se mejorase la seguridad en la zona. Entonces ya solicitaba el paso de peatones elevado y la reparación de la marquesina de la zona.

Recientemente, Concello y Diputación ejecutaron una obra de ampliación de la calzada y señalización, pero no elevaron el paso. Ahora los peatones cruzan a escasos metros de un cambio de rasante cuesta abajo, al que los vehículos llegan a gran velocidad. Además, en el margen donde se ubica el antiguo club de tenis Monterreal se sitúa una torreta de media tensión y un poste y un módulo de Telefónica, que impiden a los conductores observar la presencia de personas que se disponen a atravesar la calzada.

El nacionalista ha solicitado asimismo un informe a la Policía Local sobre la seguridad vial en el tramo y confía en que los agentes le den la razón en su demanda.