El Festival de Cortometrajes de Cans llega a su séptima edición convertido en una de las citas más importantes del audiovisual gallego, y la pequeña aldea de O Porriño se prepara ya para recibir entre los días 19 y 22 de mayo a los miles de visitantes que se acercan hasta allí para conocer las las propuestas de los nuevos realizadores.

Este año la celebración es mayor si cabe porque la Academia del Cine Español ha decidido que los trabajos que resulten premiados entren en la preselección para los Premios Goya, lo que para el director del festival, Alfonso Pato, significa reconocer a Cans "como una alternativa seria en el mundo de los festivales".

El Festival de Cans celebra este año su séptima edición, que se anuncia como la más novedosa de la historia. ¿Qué sorpresas se encontrarán los visitantes?

Sí, dinero no tendremos pero ideas nos sobran (ríe). Este año potenciamos mucho la música en nuevos espacios como la carretera o el gallinero y tenemos secciones como el Rock'nRoad y el Galiñeiro Unplugged, pero siempre con la mirada puesta en los nuevos creadores, que es lo que define a este festival.

El programa de este año incluye un concierto de Coque Malla y la presentación del nuevo trabajo de Di Elas, el grupo de Luis Tosar. ¿La música se ha convertido en un elemento imprescindible en Cans?

La música nació como un complemento pero poco a poco se fue creando una especie de festival paralelo. Nosotros enfocamos la música desde una vertiente que tiene que ver con el cine y siempre viene a tocar gente relacionada con este mundo. Además, no hay que olvidar que el de Cans es un festival de calle y que por aquí pasan al año más de siete mil personas. Toda esa gente necesita otro tipo de programación y actividad paralela que es la que tratamos de ofrecerle. Las actuaciones son de acceso libre, por lo único que se paga aquí es por asistir a las salas de proyección de los cortos en concurso.

Este año también se inaugura el Torreiro das Estrelas, un paseo donde los famosos que acuden a Cans podrán dejar su huella. Los primeros en hacerlo serán Ernesto Chao y Luis Tosar. ¿Qué motivó esta elección?

Decidimos que en el Torreiro das Estrelas estuviese consagrada la gente homenajeada en el festival y también algún visitante muy ilustre que pasara por aquí. Ernesto Chao es el homenajeado de este año y Luis Tosar, además de ser el primer premiado del festival, fue una persona muy importante en el impulso de este festival. Además, aprovechamos que este año puede estar aquí para poner su estrella.

La colaboración de los vecinos es fundamental a la hora de organizar el festival y ahora también van a poder formar parte de un jurado especial. ¿Cómo surgió la idea?

La idea es que vecinos que no participaban tan directamente en el festival, se integren y conozcan el proceso por dentro. Se trata de ponerlos al mismo nivel de las estrellas que acuden allí. Me costó mucho convencerlos, pero creo que la experiencia va a ser muy positiva y que el año que viene tendremos muchos candidatos. Pienso que uno de los grandes logros de Cans ha sido levantar la autoestima de una aldea del rural.

¿Cómo afecta el festival a la actividad económica de la zona?

Desde luego, durante los días del festival los bares están a tope y creo que a estas alturas la ocupación hotelera ronda el cien por cien. Pero sobre todo, hay un pequeño volumen de negocio a nivel audiovisual porque el festival está funcionando como un foro de encuentro entre profesionales donde se generan ideas y relaciones muy interesantes. Trataremos de potenciar esto en los próximos años y seguir funcionando de intermediarios entre la gente que hace cine.

¿Qué diagnóstico haría del audiovisual gallego a juzgar por las propuestas que reciben?

Este año hemos recibido menos trabajos que otros años, en torno a unas 140 piezas. Creo que no se deberían frenar las ayudas a los nuevos creadores porque de ahí es de donde puede nacer la industria del futuro. La Administración debe tener conciencia de que hay que ayudar a los creadores y no sólo de forma económica, sino también proporcionándole una orientación y ejerciendo una tutela sobre ellos.

¿Siguen con la intención de convertir Cans en un festival internacional?

Este año vamos a tener una muestra de cortometrajes de animación del norte de Portugal y nos gustaría de cara al futuro que el festival abarcara producciones de fuera de Galicia pero de momento tenemos bastante material de buena calidad aquí y, en todo caso, la parte principal de la competición siempre va a ser la gallega.

Muchos de los directores noveles que pasaron por Cans regresan años después al festival para presentar un avance de sus películas en la sección "Fillos de Cans"...

Es algo de lo que estoy particularmente orgulloso. Este año estrenan película cinco realizadores nuevos y es un motivo de satisfacción saber que se forjaron en este festival. De hecho cuando los llamas están encantados de venir aquí a presentar un adelanto de sus primeros largos. Es algo que nos anima a seguir adelante.

¿Qué ha significado que la Academia del Cine Español haya decidido que los cortos ganadores en Cans participen en la preselección de los Goya?

En primer lugar, significa que el Festival ha sido reconocido como una alternativa seria en el mundo de los festivales y, por otro lado, es una recompensa a nuestro trabajo. Además, consideramos que es un premio muy grande para los nuevos creadores, porque no todos los festivales te pueden ofrecer que tu corto si gana entre en la preselección de los Goya y nosotros somos uno de esos elegidos. Esperamos que de aquí salgan cineastas muy importantes. De momento, tenemos un palmarés que nos avala porque los cortos que salieron de aquí fueron muy premiados y para los creadores estamos siendo una garantía.

¿Cuál es el secreto del éxito de Cans?

El secreto es una combinación de vecinos entregados, que se adaptaron muy bien a un mundo que desconocían completamente, una organización que trabaja con mucha ilusión y un público, educado y correcto, que es el mayor patrimonio del festival.