La Asociación de Afectados de Chapela por la ampliación de la autopista AP-9 ha presentado un recurso contencioso-administrativo ante la Audiencia Nacional para reclamar que se someta a impacto ambiental el proyecto para aumentar la capacidad del vial con nuevos carriles en el tramo entre Rande y Teis.
La decisión del colectivo social de Chapela responde a la resolución del Ministerio de Medio Ambiente por la que descartó someter el proyecto a evaluación de impacto ambiental. Según argumentó el Ministerio de Medio Ambiente, a través de la Secretaría de Estado de Cambio Climático, la decisión se adoptó "tras consultar a distintas administraciones y otras instituciones previsiblemente afectadas, que no se deducía la posible existencia de impactos ambientales significativos".
La Asociación de Afectados presentó diversas alegaciones contra esta resolución, aunque todas fueron desestimadas por la Secretaría de Estado de Cambio Climático. Tras agotar la vía administrativa, sólo les quedaba la opción de recurrir al contencioso-administrativo ante la Audiencia Nacional, que confían que les dé la razón.
El portavoz de la asociación de afectados, Francisco Puch, considerar que la actuación requiere del estudio ambiental puesto que existe un "impacto potencial" sobre el espacio natural Ensenada de San Simón, incluida en la Red Natura 2000 y catalogado como Lugar de Interés Comunitario, así como en los restos del castillo de Rande, catalogados como Bien de Interés Cultural.
La Asociación Cultural de Rande también advirtió recientemente del grave impacto que causaría la ampliación del puente de Rande sobre los restos de la fortaleza, que acabaría con el único vestigio que resta sobre las defensas terrestres relacionadas con el histórico combate naval de la Batalla de Rande, que en 1702 enfrentó a las escuadras de las coaliciones anglo-holandesa e hispano-francesa, dentro del contexto de la Guerra de Sucesión Española.
Los vecinos de Chapela también argumentan que la ampliación de la autopista afectará a otros bienes patrimoniales, como el cementerio y la iglesia parroquial, y a equipamientos de la parroquia como el colegio, el instituto, el pabellón y el centro de salud, entre otros. También advierten de la contaminación acústica y ambiental que provocará la ampliación de la AP-9.
