El concejal no adscrito de Mos, Gerardo Alonso Porto, anunció ayer su intención de llevar ante el Defensor del Pueblo la celebración del Pacto Antitransfuguismo en el que fue declarado tránsfuga y la decisión del Parlamento Galego de elaborar una lista con ediles tránsfugas e impedir que se presenten a las elecciones en un partido político.

El edil entiende que ambas decisiones pueden vulnerar la Constitución española y los derechos cívicos de los concejales, cuya acta es personal, independientemente de que se presenten en una lista cerrada.

En la argumentación de Gerardo Alonso figura, entre otras cuestiones, el hecho de que los partidos pretenden imponer su criterio general por encima de los intereses concretos de la localidades lo que deja clara la falta de democracia.

La decisión del Parlamento Galego, en la que todos los grupos aprobaron hace poco más de una semana el impedir que los ediles declarados tránsfugas -caso de Gerardo Alonso- por el pacto antitransfuguismo aparezcan en listas en las próximas municipales, Alonso dijo que "es una decisión de apoyo a los partidos frente a la sociedad y a los vecinos" y añadió que, cuando hace un año, que se tomó la decisión de presentar la moción de censura en Mos, "la presentamos porque prevalecían los intereses de los vecinos y generales por encima de los intereses de los partidos políticos, porque era un gobierno de coalición que no gobernaba y había que tomar medidas". "Los partidos políticos buscan su interés y lo que prevaleció en el caso de Mos fue el interés de los vecinos", afirmó.

Gerardo Alonso indicó que el Parlamento Galego no puede hacer una lista negra de personas que hubiesen sido declaradas tránsfugas por el Pacto Antitransfuguismo "porque este no está amparado por la Constitución española", pero en caso de hacerla "deberían hacer una lista de concellos con un pacto de intereses entre dos partidos que no funcionan bien, que son un desgobierno total, porque llegaron a un acuerdo de gobierno supramunicipal firmando en Santiago, donde se ven los intereses de dos partidos y no de cada uno de los pueblos".

Gerardo Alonso defiende la moción de censura porque está amparada por la Ley. "Si los vecinos eligiesen directamente al Alcalde ya no habría esa posibilidad pero la ley dice que los vecinos eligen concejales y los concejales al alcalde, y mientras sea así los concejales tenemos derecho a sacarlos del cargo que ocupan si vemos con claridad que hay un desgobierno; es lo que pasaba en Mos", dijo.

Además el edil, añade que el acta es personal "y si es personal no es del partido, y por eso en ocasiones es necesario llegar a lo que hemos llegado en Mos".

Indica además que si se cambia la Ley para impedir las mociones de censura "perderíamos democracia en los concellos y sería una dictadura".

Añade que casi un año después de la moción de Mos los vecinos no preguntan por ella "porque tienen un gobierno unido, trabajador y que da estabilidad al Ayuntamiento, todo lo contrario de lo que tenían".