La configuración de la nueva corporación en Gondomar y de sus órganos de gobierno puede estar sujeta a un nuevo error. Y es que el BNG advirtió durante la celebración del pleno extraordinario de ayer que la presidencia de la sesión por parte de Alfonso de Lis, en sustitución de un convaleciente regidor, Martín Urgal, fue irregular. Y es que, tal como denunciaron los nacionalistas, su nombramiento como teniente de alcalde es "contraria al ordenamiento jurídico vigente", ya que establece que "el alcalde nombrará y cesará a los tenientes de alcalde entre los concejales de la junta de gobierno local", algo que no sucede en el caso de De Lis.
La propia secretaria municipal reconoció que existía "una irregularidad que deberá ser estudiada y corregida. Al respecto, el edil simplemente indicó que esperará a conocer lo que los servicios jurídicos estimen oportuno. El portavoz del Bloque, Pauliño del Río, aseguró que habría que revocar el decreto de Alcaldía sobre el nombramiento de teniente de alcalde a de Lis o, en su defecto, modificar la junta local para su inclusión. "Isto mesmo sucede coa segunda tenente, Natalia Salgueiro", explicó. Además, el ex regidor, Antonio Araúxo, anunció que su grupo estudiará el tomar las medidas oportunas contra los acuerdos alcanzados en el último pleno "pois ao celebrarse fora da lei quedarían sen efecto".
Cambios en las sesiones
El equipo de gobierno sacó adelante la modificación en las sesiones plenarias por la que pasarán a celebrarse los últimos jueves de cada mes a las nueve de la mañana. Además, cambia su ubicación y volverán a la segunda planta de la Casa da Cultura. Mientras el tripartito no aclaró las motivaciones de estos cambios, la oposición lo considera un intento para "disuadir aos veciños dos plenos e evitar así os abucheos". Asimismo, subrayan que 22 asociaciones vecinales pidieron que se desarrollasen a partir de las 20.00 horas. Tampoco entienden el nuevo emplazamiento, porque no permite el acceso de todos los ciudadanos, al tiempo que recuerdan que, salvo el PP, todos habían solicitado que tuviesen lugar en el auditorio Lois Tobío.
En este mismo sentido se manifestó la ejecutiva local del PSOE, quien reprochó al tripartito que malgastasen más de 7.000 euros en una sesión extraordinaria "carente de contenido". Los allí presentes mostraron manoplas para votar en el pleno, al considerar que los ediles expulsados ya no les representan. Nuevamente cerca de un centenar de personas acudieron con banderas para protestar contra la moción de censura.
