El portavoz del grupo municipal del PSOE en Gondomar, Alfonso De Lis, negó ayer las acusaciones de transfugismo realizadas desde su partido y rechazó que exista una resolución definitiva sobre su expulsión del Partido Socialista, cuyas siglas e ideología afirmó, “seguirán estando presentes en el Ayuntamiento de Gondomar”. Respaldado por los ediles Manuel Gómez, Carlos Cabaleiro y Teresa Pereira -que también firmaron la moción de censura para arrebatar la Alcaldía al BNG, dejándola en manos del PP-, De Lis compareció en una rueda de prensa para denunciar que se “intentó confundir a la opinión pública” al hablar de la expulsión del partido de estas cuatro personas.
Para justificar esta “falta de rigor en las informaciones”, el portavoz expuso el estado actual en el que se encuentra el proceso en el que están inmersos. Así, el actual concejal de Urbanismo de Gondomar, declaró que recurrieron “en tiempo y forma” ante la resolución adoptada por el PSOE sobre la “expulsión provisional” de los cuatro ediles. Según indicó, en esta resolución se les comunicaba que la medida “provisional” venía propuesta por un supuesto incumplimiento de los estatutos socialistas, en los que se incluye “la posibilidad de expulsión cuando se apoya una moción de censura en contra del acuerdo adoptado por la dirección del partido.
De Lis manifestó su sorpresa ante la resolución de la “expulsión provisional” al no tener constancia de ningún acuerdo adoptado por el PSOE. Sin embargo, confesó estar seguro de que la decisión final que adopte el partido les será favorable. Aunque. en caso de que la resolución pase por una expulsión definitiva, el concejal afirmó que actuarán “en consecuencia”. Asimismo, aseguró que la voluntad de su grupo municipal de promover la censura fue comunicada tanto al secretario provincial del PSdeG en la provincia de Pontevedra, Modesto Pose, como a la secretaria de Organización do PSdeG, Mar Barcón.
Trato vejatorio
El edil declaró, además, que la cúpula del partido fue informada sobre el trato “arbitrario, insultante y vejatorio” que sufrieron los ediles, acusados de tránsfugas. Una calificación que De Lis rechazó ya que en Gondomar “no se cambió o mantuvo ninguna mayoría” puesto que el BNG ejercía el mandato en minoría con el apoyo del PSOE. El concejal de Urbanismo concluyó su comparecencia aseverando que un 70 por ciento de los militantes locales apoyaron la postura adoptada por su grupo mediante un escrito entregado en el partido y denunció que la ejecutiva de Gondomar “incumple los estatutos” porque en los últimos meses no celebró ninguna asamblea”.
