Una plaga de culebras parecen querer quedarse en el barrio de Lordelo, en la parroquia mondarizana de Toutón. Hace aproximadamente un año una pareja de vigueses compró un terreno con una casa y una bodega en la parroquia sin imaginarse que al limpiar la maleza existente se iban a encontrar con casi una decena de camisas (pieles) de culebra.

Al comenzar a acondicionar la vivienda comprobaron que no sólo eran camisas de épocas pasadas, si no que varios ejemplares de estos reptiles seguían paseándose libremente por su nueva propiedad.

Por el momento han avistado tres, aunque también los vecinos de la zona aseguran a ver observado varios de estos reptiles por la carretera y con frecuencia cruzando la carretera de lado a lado.

Según explica, Pilar Matasche, la propietaria del terreno "me dan mucha grima y salir con chanclas es un riesgo pero me gusta esta casa y no quiero irme de aquí", explica.

Entre las especies han encontrado culebras escalera, la mayoría, y una bastarda, que aunque tiene los dientes bastante atrás sí contiene veneno. Según relatan los testigos, las camisas que han encontrado y varias de las que han visto son de metro y medio de largo aproximadamente.

Para buscar una solución se han puesto en contacto con el Seprona, Servicio de Protección de la Naturaleza, de la Guardia Civil. Sin embargo, desde este cuerpo le han explicado que ellos no tienen medios técnicos para capturar y trasladar a estos animales. También han hablado con el alcalde de la localidad, Julio Alén, quien les ha asegurado comprender su malestar pero, igualmente, a nivel municipal tampoco existen medios para solucionar un caso así. Finalmente, han remitido una carta a la Consellería de Medio Rural esperando que desde este departamento de la Xunta les den alguna solución.

La desaparición de hurones y zorros en la zona puede ser causa de que las culebras se reproduzcan sin barreras.