Un vecino de Mondariz, Andrés P. A., de 44 años de edad, fue detenido por la Guardia Civil después de que hubiese prendido fuego a la casa de su compañera sentimental, en Quintans-Riofrío. Tras ser puesto a disposición judicial, la juez del Juzgado de instrucción número tres de Ponteareas decretó su libertad condicional con una orden de alejamiento de medio kilómetro de la víctima.

Los hechos ocurrieron en la tarde del domingo, cuando la Guardia Civil fue avisada de un incendio que se había iniciado en una casa de la parroquia de Frades y en cuya extinción participaron dos vehículos del Parque Comarcal de Bomberos de Porriño.

Malos tratos

Según informaron fuentes de la Benemérita, una vez localizada la propietaria de la vivienda Saladina A. P., ésta explicó que había sido avisada por los vecinos del fuego tras acudir a misa y dijo que sospechaba que su pareja sentimental era el autor del mismo. Indicó además que en el último año, el hombre la agredía física y psíquicamente de forma continua.

Fuentes de la Guardia Civil informaron que habían detenido al vecino a las 23.00 horas del domingo, después de que éste se personase en el cuartel de la Guardia Civil en su moto, tras tener conocimiento de que lo estaban buscando.

La vivienda quemada es propiedad de Saladina y la compartía con su hijo y el supuesto pirómano y maltratador.

Según los vecinos, Andrés no es un hombre violento salvo cuando consume alcohol y “é posible que nin siquiera supera o que estaba a facer”, apunta una vecina.

Otro vecino indica que las llamas afectaron especialmente a dos habitaciones y había causado el fuego rociando la zona previamente con un líquido inflamable, tras lo que abandonó precipitadamente el lugar consciente de su actuación premeditada “inda que despois lle viñera o arrepentimiento”.

Saladina todavía no ha podido recuperarse de la fuerte conmoción sufrida al ver su casa en llamas y se encuentra acogida en la vivienda de unos vecinos pero bajo control sanitario. “Aún no entiende lo que pasó, y aunque él le decía que pensaba quemar la casa no entiende que lo hiciese”

La pareja lleva muchos años conviviendo sin que hasta ahora se registrasen problemas graves aunque sí constantes discusiones, afirman los vecinos.

Dos vehículos trabajaron en la extinción

Según los bomberos del Parque Comarcal de Porriño, la casa quedó inhabitable tras el incendio y a pesar de la actuación en la extinción.

El Parque Comarcal trasladó a la localidad dos unidades compuestas por varias efectivos, una motobomba y vehículo nodriza.

Según los bomberos, las llamas afectaron sobre todo a dos habitaciones pero el humo dañó el resto de las dependencias. El equipo de extinción apunta que no existía demasiado mobiliario en el interior, circunstancia por la que no hay que lamentar mayores perdidas.

Los primeros en llegar al lugar de los hechos, fueron los efectivos de la Guardia Civil alrededor de las 17.45 horas de tarde. Los agentes comprobaron como el fuego salía por la ventana de una de las habitaciones y comprobaron en el interior de la casa no había nadie. Posteriormente llegó el equipo de bomberos de Porriño que trabajo en la extinción y que no apuntó causa alguna.