"El Plan Sectorial de Vivenda tendrá que encajar en los parámetros del Plan Xeral y vamos a lograrlo, que nadie tenga duda de eso". Con estas palabras trataba ayer Efrén Juanes, alcalde de Nigrán, de tranquilizar a vecinos del municipio afectados por el proyecto de construcción de cerca de 2.000 viviendas que planea la Consellería de Vivenda hasta 2019.

El regidor nigranense se comprometió a hacer propias "todas las sugerencias, ideas y planteamientos que aporten los integrantes de la comisión especial de seguimiento", creada en el seno del consello sectorial del PXOM _-donde están representadas todas las fuerzas políticas y los principales colectivos sociales- para abordar de forma específica el Plan de Vivenda.

Juanes garantizó que el gobierno municipal hará llegar esas propuestas a la Consellería de Vivenda, con cuyo delegado provincial se reunirá hoy mismo junto a representantes de los afectados.

En su comparecencia, la primera desde las protestas vecinales que interrumpieron el pleno la pasada semana, el alcalde lamentó la campaña de "confusión y crispación" emprendida por los grupos municipales del Partido Popular y Unión Centrista, que con su posicionamiento "parecen querer defender que la gestión del urbanismo en Nigrán siga en manos de la iniciativa privada", apuntó.

El titular del ejecutivo loca aclaró que el proyecto de la Consellería de Vivenda está en una fase "muy inicial" y que el periodo de alegaciones abierto supone una "oportunidad de participación" para particulares y colectivos sociales que pueden así colaborar en el ajuste del proyecto a la realidad nigranense.

Efrén Juanes defendió el proyecto como "una oportunidad para Nigrán", puesto que supondrá "poner en el mercado viviendas de primera calidad a un precio razonable". Frente a los que desconfían de su implantación, el alcalde aseguró que "ningún vecino se quedará sin casa, ni será desalojado de su barrio o parroquia", puesto que "son compromisos que exigiremos a la consellería", apuntó.

Con respecto al pleno solicitado por los grupos de la oposición, el alcalde anunció que se celebrará entre los días 8 y 12 de febrero, aunque desde el gobierno creen "que no servirá para decidir nada".