La Consellería de Pesca decomisó más de cuatro toneladas de pescado y marisco en las rías de Vigo y Pontevedra en los primeros nueve meses del año 2008. En total, hasta el mes de septiembre se realizaron más de 3.800 inspecciones y se levantaron hasta 350 actas por presunta infracción. Una de las últimas actuaciones importantes en esta materia se registró hace escasas semanas en el puerto de Bueu, donde el Servizo de Gardacostas decomisó más de 1.000 kilos de jurel debido a su talla antirreglamentaria. Estas operaciones tienen como objetivo velar por el cumplimiento de la ley en lo que se refiere a tallas mínimas, cupos, horarios de trabajo, seguridad alimentaria y respeto a las vedas en la extracción de determinados recursos.

El mayor número de intervenciones se registró en la Ría de Vigo, ámbito en el que trabajan más de media docena de cofradías de pescadores y cooperativas, entre ellas las de Cangas y Moaña. Los servicios de la Consellería de Pesca realizaron desde enero hasta septiembre casi 3.450 inspecciones y 280 tuvieron como resultado la instrucción de un acta de presunta infracción. Los decomisos totales ascienden a algo más de 3.000 kilogramos de distintas pesquerías. De esa cifra, casi 1.400 kilos eran de diversos pescados, como jurel o sardina; alrededor de 950 eran mariscos bivalvos, 330 cefalópodos como el pulpo o el choco, 325 crustáceos (nécora, lumbrigante o centolla) y apenas 100 de equinodermos como el erizo de mar.

Incautaciones

Los decomisos generalmente van acompañados de incautaciones de bienes materiales como aparejos de pesca, redes o en algunos casos incluso embarcaciones. El Servizo de Gardacostas se incautó en la ría viguesa de más de 1.150 medios, entre los que cabe destacar más de 900 nasas, 163 aparejos de enmalle, cacharros del pulpo y hasta dos equipos de submarinismo.

En el caso de la Ría de Pontevedra, que afecta a marineros de Bueu e incluso de la cofradía de Aldán-O Hío, el número de intervenciones de los guardacostas fue muy inferior, con 384 operaciones y de las que casi 80 fueron constitutivas de una presunta infracción en materia pesquera. El decomiso de pescado y marisco ascendió a poco más de 1.300 kilos, en su inmensa mayoría bivalvos como almeja o berberecho. También se aprehendieron 182 kilos crustáceos, casi 50 de cefalópodos y 16 de pescado. En lo que respecta a las incautaciones de material, sobresalen las 117 nasas requisadas o las 51 unidades de aparejos de enmalle. En total, los vigilantes del Servizo de Gardacostas se incautaron de más de 200 objetos materiales.

¿Qué ocurre con todo lo que se incauta y decomisa? Desde la Consellería de Pesca e Asuntos Marítimos explican que el pescado y el marisco se intenta devolver al mar, algo que sólo es posible si aún se encuentra con vida. En caso de que no sea así existen dos alternativas: su entrega a asociaciones benéficas y de caridad o, si la cantidad decomisada es muy elevada, se realiza una subasta, cuyos ingresos "devólvense ós cidadáns a través das arcas públicas".