Una nueva pasarela de madera sobre el río Maceiras permite a los viandantes el acceso a la zona de Vilavella desde la antigua carretera N-550 sin riesgo de atropello. El paso peatonal era una demanda de los vecinos de la zona desde hace años por el peligro que suponía cruzar el antiguo puente de piedra sobre el Maceiras, puesto que carece de arcén y aceras, lo que obligaba a los peatones a transitar por el lateral de la calzada.

La nueva pasarela discurre junto al puente, por el exterior del petril, y dispone una barandilla metálica para garantizar la seguridad de los usuarios. La actuación contó con un presupuesto de 18.000 euros, financiados entre la Diputación y el Concello, y la ejecución de la obra se contrató a la empresa Covsa.

Además la actuación se completó con la instalación de otro puente de madera sobre el río Maceiras al final de la calle Salgueiral, a unos cincuenta metros del anterior, para facilitar el acceso desde esta zona hacia la Plaza de Ponteareas.

Por otra parte, las obras de "humanización" de la calle Meixón Frío, que también ejecuta la empresa Covsa, marchan a buen ritmo por lo que está previsto que cumplan el plazo acordado de dos meses, y estén concluidas antes de las navidades.