Eva González / A GUARDA

Edificaciones circulares que pueden formar parte de un castro son algunos de los restos que están apareciendo en la excavación arqueológica que se realiza en en el barrio de Saa, de Camposancos (A Guarda) y que supervisa la Dirección Xeral de Patrimonio. Es prematuro afirmar el valor del hallazgo, hasta no contar con el informe, tras el análisis de piezas y elementos que está efectuando una empresa profesional de Vigo sobre los restos encontrados.

El concejal delegado de Patrimonio del Concello de A Guarda, Javier Crespo González, ante la carencia de informes definitivos, apuntaba la probable hipótesis de que las edificaciones circulares fuesen de un periodo posterior a las que se encuentran en el monte de Santa Trega, que tuvo su mayor desarrollo en los siglos I y II a.C.

La zona de excavación está situada precisamente al pie del mismo, por lo que tampoco es descabellado deducir que se trate de un asentamiento en una cota más baja y cercano al mar, donde fuesen más soportables los rigores del invierno.

Javier Crespo informó que una empresa de Vigo "está estudiando los vestigios, como restos de cerámica que aparecieron en diversas capas, dentro y fuera de las edificaciones", por lo que puede deducirse que podrían pertenecer a épocas distintas.

En el lugar de la excavación puede contemplarse además lo que podría ser un algibe, canalizaciones y un sarcófago, supuestamente de la época alta medieval.

Entre las piezas que están en estudio hay una escultura sobre cerámica. También se encontró un "cuncheiro" o vertedero donde se acumulaban restos.

Los trabajos de excavación, que comenzaron por unas simples catas, se vienen realizando desde hace mes y medio.

Responsables de la Dirección Xeral de Patrimonio visitaron el lugar la pasada semana, según ha confirmado el concejal quien se ha referido a estos trabajos con toda cautela, precisando que los costea el particular propietario del terreno, además del Concello, que corre a cargo de los que se están realizando en la vía pública.

La zona está vallada y parte de la fosa de excavación está cubierta por un plástico.