En pleno ordinario, el Partido Popular aprobó de forma definitiva el reglamento de circulación que afecta al acceso al casco antiguo. Esto supone que, desde el lunes, el paso queda restringido a 120 matrículas de residentes y otros. Mediante tarjeta y con intervención de las cámaras se registrarán los accesos autorizados.
El PP justificó tales medidas apoyándose en informes técnicos tendentes a mejorar la calidad de vida de los residentes: facilitar la movilidad de los transeúntes, preservar los monumentos de la contaminación, humanizar las calles y reactivar el comercio y la hostelería. se agregan como ventajas la ausencia de ruidos causados por el tráfico y la seguridad de los viandantes.
Sin horario
Se apunta que la aplicación del plan permitirá, sin límite de horarios, el acceso a residentes, hoteles, vehículos de urgencia, taxis y vehículos de minusválidos. El sistema de control es de última generación y "totalmente pionero en todo el territorio español". Consiste en un dispositivo de videocámara que permite la lectura de las matrículas y, por tanto, el acceso o no a la zona limitada.
El BNG, que votó en contra, insinuó que las medidas podrían servir para para pagar fidelidades de los amigos del equipo de gobierno. El alcalde, Vázquez Almuiña, les replicó que le entregara la relación, por si había "amigos" del edil del Bloque, Xosé Henrique Fernández.
