A pesar de que el público abarrotó el salón de plenos, la sesión trascurrió sin incidentes, excepto algún abucheo o aplausos en intervenciones puntuales de los concejales. Sin embargo, la nota negativa la puso un vecino cuando el alcalde abandonaba el salón de plenos, tras levantar la sesión, y a su paso le llamó "dictador de mierda" y "delincuente".

Xaime Rei se encaró y le amenazó con presentar una denuncia por los graves insultos. "Eso me lo vas a repetir en los Juzgados", le espetó el alcalde al ciudadano, aunque enseguida se interpuso otro concejal y rápidamente calmó los ánimos.

Durante la sesión el alcalde amonestó en dos ocasiones al público por interrumpir la sesión con comentarios.