Juan Carlos Unzué admite que el Celta no afronta estas jornadas de Liga en las mejores condiciones anímicas después de que el equipo vigués perdiese sus opciones europeas. Cualquier contratiempo afecta a un grupo al que el navarro quiere defender de las críticas por su lamentable cierre de temporada. "No era fácil. Estamos en un momento en el que cualquier situación anómala el grupo la siente más que en otra parte de LaLiga, donde hemos estado compitiendo hasta el último momento. Tengo que defender al equipo y a los jugadores porque desde el primer partido de Liga hasta hoy lo han intentado. Pero con estos argumentos y este estado de ánimo es difícil mantener un rendimiento alto hasta el último minuto. Nos va a quedar en los últimos partidos no haber conseguido alguna victoria para seguir insistiendo o compitiendo por Europa hasta el último día. Lo hemos hecho hasta la jornada treinta y seis, pero desgraciadamente con los partidos que nos quedaban y con el estado de ánimo que tenemos no hemos encontrado ese punto", reconoció.

Al analizar la actuación de ayer en el Bernabéu, Unzué valoró la valentía de su equipo por querer disputarle el balón al Real Madrid, pero reconoce que fallaron en el último pase. "Hemos intentado ser lo que hemos sido durante toda la temporada. Le hemos intentado quitar la pelota al Madrid, creíamos que era la mejor manera de defendernos de estos jugadores. En la primera parte hemos competido bien, hemos hecho quince primeros minutos bastante buenos en los que hemos llegado con dos o tres situaciones más o menos clara. Pero nos ha faltado en el último tercio en el área rival poder hacer que todo ese juego fuese más efectivo, nos faltó ese último pase. Como consecuencia de esa falta de efectividad, el rival ha conseguido recuperar pelotas en su propio campo y al contragolpe, sobre todo con la calidad y la efectividad de sus jugadores, ha hecho que nos fuésemos al descanso con un resultado demasiado abultado", añadió.