Iago Aspas no quiere perderse el clásico gallego del fin de semana y apura la recuperación de la rotura fibrilar de grado uno del bíceps femoral derecho que sufrió a mediados de abril en la recta final del partido ante el Barcelona. El delantero y máximo goleador del Celta confía en reaparecer ante el Deportivo y vivir un derbi que tendrá un paréntesis al menos de una temprada después de que el equipo coruñés certificase el domingo pasado su descenso a Segunda División.
Los médicos habían calculado un periodo de recuperación de la lesión de Aspas de entre dos y tres semanas. Cumplidos los quince días, el jugador ha experimentado una gran mejoría en la zona dañada y se muestra optimista sobre sus posibilidades de reaparecer ante el Deportivo, un partido de especial relevancia para él por la emotividad con la que siempre afronta los clásicos gallegos. De hecho, es el jugador que más ira suscita entra la afición deportivista, a la que el de Moaña responde últimamente con grandes actuaciones, como la protagonizada las navidades pasadas en Riazor. Allí el Celta ganó por 1-3, con dos tantos de Aspas.
Aunque lo que ahora mismo interesa más a Iago Aspas es recuperarse totalmente para entrar en la lista definitiva de la selección española que participará en el Mundial de Rusia, el delantero del Celta tampoco quiere perderse un clásico gallego que el próximo año desaparecerá de su programación debido al descenso del conjunto coruñés.
El pasado viernes, Aspas declaraba a Celta Media que "esperaba llegar" al derbi, pero que la decisión tenía que ser meditada: "No es solo una decisión mía, por las sensaciones que tenga, sino también del doctor, porque tememos que pueda haber una recaída por querer apurar los plazos".
Dieciocho días habrán pasado de su lesión cuando el sábado se dispute el derbi gallego en Balaídos. Aspas llegará al mismo en los plazos establecidos en un principio por los servicios médicos del club, cuyo responsable es Juan José García Cota, que también trabaja con la selección española. Después de la conversación que mantengan el médico y el futbolista se conocerá si el delantero de Moaña entra finalmente en la convocatoria de Unzué para el duelo contra el Deportivo.
A cinco días de la cita en Balaídos, Aspas se muestra optimista sobre sus opciones de reaparecer y dejar atrás una lesión muscular que le privó de los partidos ante el Valencia y el Villarreal, en los que el Celta enterró muchas de sus posibilidades de meterse en la pelea por los puestos europeos. Las opciones de alcanzar la séptima plaza existen, pero ya son muy remotas cuando restan tres jornadas de Liga, en las que Aspas intentará recuperar el buen estado físico que esta temporada le convirtió en uno de los mejores jugadores de LaLiga y que le llevará muy posiblemente a la Copa del Mundo de Rusia.
