El Celta afronta sus últimas opciones europeas en el partido que hoy le enfrenta al Valencia en Balaídos (16:15 horas, Bein LaLiga). La séptima plaza de la clasificación general de LaLiga continúa a cuatro puntos de distancia, pero esta posición carecería del premio que le reserva la UEFA si el Sevilla conquista esta noche la Copa del Rey ante el Barcelona. Además de ganar al conjunto levantino, los célticos tendrán que esperar el triunfo del equipo azulgrana para seguir manteniendo viva su ilusión europea y no quedarse atrapados en el tiempo, sin objetivos en las cuatro últimas jornadas. El rival de esta tarde es uno de los animadores del campeonato. Acumula dos derrotas consecutivas (Barcelona y Getafe) que no han puesto en peligro su cuarta posición, pues mantiene al Betis a diez puntos de distancia y con el golaverage a favor cuando restan cinco jornadas.

Juan Carlos Unzué tendrá que afrontar este partido sin Iago Aspas, Jonny Otto y Nemanja Radoja, mientras recupera a Hugo Mallo y al 'Tucu' Hernández. Los valencianistas tampoco podrán contar con Dani Parejo, Gayá y Simone Zaza, aunque Marcelino rescata a Kondogbia y a Paulista. De esta forma, los tres goleadores del partido de la primera vuelta en Mestalla (Zaza, Parejo y Aspas) no estarán hoy en Balaídos, donde el Celta continúa sin conocer la derrota en lo que va de 2018. De los ocho partidos disputados en casa, los célticos acumulan cuatro triunfos y otros tantos empates.

Ha sido en casa donde el conjunto de Unzué se ha mostrado más regular en una temporada de altibajos. Es ante su afición donde los célticos despliegan su mejor fútbol y un mayor carácter competitivo, como pusieron de manifiesto el martes pasado ante el Barcelona. El líder de LaLiga solo sumó un empate después de adelantarse en dos ocasiones en el marcador. Pero la mejor referencia para el duelo de hoy la tiene el técnico del Celta en la goleada que sufrió el Sevilla en su visita a Vigo a comienzos de abril.

El problema para los célticos es que en esta ocasión no podrán contar con su estrella: Iago Aspas. El delantero moañés, que ya suma 20 goles en LaLiga, sufrió una rotura fibrilar ante el Barça que le mantendrá de baja entre dos y tres semanas. A esta ausencia se suman la de Jonny Otto, tras agotar ciclo de tarjetas amarillas, y la de Nemanja Radoja, que en el entrenamiento de ayer se resintió de sus dolores de espalda.

Unzué, por lo tanto, está obligado a recomponer el equipo y es probable que recurra a fórmulas que le dieron buenos resultados en el pasado. Por ejemplo, trasladar a Hugo Mallo, una de las novedades tras cumplir la sanción por tarjetas, al lateral izquierdo y mantener a Wass en el derecho. Así jugaron ambos en el Camp Nou, en la primera ausencia de Jonny en este campeonato. La opción de Robert Mazan es poco probable, pues el lateral zurdo eslovaco solo jugó ante el Alavés desde que en enero firmó por el Celta. Roncaglia y Sergi Gómez, titulares ante el Barça, también son los favoritos para repetir en el eje de la defensa ante un rival que se presentará en Vigo con dos atacantes tan rápidos y verticales como los excélticos Santi Mina y Rodrigo Moreno.

En la medular es segura la presencia de Stanislav Lobotka en el timón. Se espera el regreso al once del 'Tucu'Hernández, una vez que Unzué confirmase ayer que el internacional chileno está al "cien por cien" después de superar unos problemas musculares. Jozabed, titular ante los azulgrana, podría cederle el puesto a Emre Mor. La presencia del turco-danés por la banda derecha obligaría a Brais Méndez a jugar más por dentro, aunque también tendría oportunidades de aparecer por el costado derecho del ataque, como cuando intercambia la posición con Aspas. Arriba seguirá Maxi Gómez, que acumula ocho jornadas sin marcar, con Pione Sisto escorado a la banda izquierda.

A pesar de la presencia de Lucas Boyé en la convocatoria, Unzué ha querido contar con un atacante más en la reserva y ha citado a Víctor Pastrana, que esta temporada se incorporó al filial céltico procedente del Alcorcón.

El Valencia, por su parte, quiere resarcirse en Vigo de las derrotas que sufrió en el Camp Nou y en Mestalla ante el Getafe. Contra los madrileños no funcionó el plan de rotaciones de Marcelino García Toral, que en la cita de Balaídos recuperará el once tipo que tan excelentes resultados obtuvo en lo que va de temporada y que incluso le permitió pelear de cara con el Barcelona por el primer puesto de la clasificación.

El preparador asturiano recupera para este compromiso al centrocampista francés Geoffrey Kondogbia y al defensa central brasileño Gabriel Paulista, ausentes ante los madrileños por sanción. Sin embargo, pierde a la brújula en el centro del campo, Dani Parejo, expulsado con roja directa en la pasada jornada. La ausencia del centrocampista madrileño es una buena noticia para el Celta, ante el que suele protagonizar buenas actuaciones, aliñadas con goles. De hecho, Parejo suma siete tantos en 12 enfrentamientos contra el equipo vigués. Unzué tendrá una preocupación menos con la baja del internacional madrileño. A pesar de todo, el técnico navarro reconocía ayer que no le importaría que el Valencia recuperase a Parejo para esta cita siempre que el Celta pudiese contar con Iago Aspas.

Pero los problemas de Marcelino García Toral no se acaban ahí, pues tampoco podrá contar con el lateral zurdo José Luis Gayá por acumulación de cartulinas amarillas, ni con el delantero italiano Simone Zaza, que se quedó en casa por una molestias musculares.

Con los excéltico Mina y Rodrigo como referencia en ataque, el Valencia intentará llevarse los tres puntos ante un Celta que también necesita la victoria para seguir manteniendo opciones, cada vez más remotas, de conseguir la vía de escape hacia Europa.