La baja por lesión de Antonio Adán para lo que resta de temporada abre la puerta al portero suplente del Betis, Dani Giménez, para los ocho partidos que restan de Liga en los que el equipo andaluz se jugará, entre otros ante el Celta, una plaza para las competiciones europeas. De los guantes del portero vigués del Betis dependerán parte de las opciones del equipo de Unzué de regresar a la UEFA Europa League.

Antonio Adán será operado hoy para corregir los problemas de pubalgia que sufre desde hace algo más de tres meses y ello deja la portería bética en las manos de Dani Giménez y del canterano Pedro López, a quienes ya se vio ayer trabajando con intensidad en el entrenamiento que el Betis completó en su ciudad deportiva.

Dani Giménez, vigués de 34 años, llegó al Betis en 2014 procedente del Alcorcón y tras una trayectoria en la que figuran su periplo de 2004 a 2009 en el Zamora y desde ese año a 2013 en el Rayo Vallecano, además de sus inicios entre 2001 y 2004 en el Celta B.

Con contrato con el Betis hasta junio de 2018, el cancerbero gallego se ha distinguido desde su llegada al Villamarín por su discreción y profesionalidad pese a los pocos minutos de los que ha dispuesto por estar siempre a la sombra de Adán, lo que le valió la renovación por dos años en 2016.

De 1,82 metros de estatura, Dani Giménez debutará en Liga en esta temporada el próximo sábado ante el Éibar en el Villamarín, pues sólo disputó los partidos de la eliminatoria copera ante el Cádiz, en la que el Betis fue eliminado.

Antonio Adán fue el gran protagonista de la victoria de la pasada jornada ante el Getafe por parar en dos tiempos un penalti de los madrileños y sacar un gol fantasma de los rivales sobre la misma raya cuando el tiempo del partido estaba cumplido. Para el próximo curso, en el Betis se apunta la llegada del guardameta Pau López, del Espanyol. Dani Giménez, mientras tanto, intentará conseguir con el equipo sevillano una plaza europea por la que también aspira el Celta.