Sergio Álvarez considera que no obtener plaza en Europa la próxima temporada "no sería un fracaso" para el Celta, pero "sí una desilusión", al tiempo que se mostró optimista sobre las posibilidades de regresar el próximo curso al continente y promete batalla hasta el final. "Pelearemos por Europa hasta el último minuto del último partido", aseguró el portero en rueda de prensa.

El "Gato de Catoira" prefiere ver el vaso medio lleno y confía firmemente en la capacidad del equipo para reponerse de los últimos malos resultados y cumplir con el objetivo que se ha propuesto el plantel. "La Liga está muy igualada, pero tenemos claro que dependemos de nosotros mismos y debemos pensar que para sumar puntos hay que ganar partidos", dijo tras el entrenamiento celebrado ayer por el plantel en A Madroa.

A pesar del bajo pico de forma del equipo en el último mes, Sergio es optimista y se ha mostrado convencido de que habrá una reacción en los últimos nueve partidos que restan. "Soy muy positivo porque este equipo ya ha demostrado muchas temporadas que va a pelear hasta el final para llegar a donde todos queremos estar", indicó. Y agregó: "Hay que exigirse lo máximo que, siendo realistas, es aspirar a Europa".

Sergio Álvarez restó, por otra parte, importancia a los silbidos que un sector de la grada de Balaídos dedicó al equipo tras el mal partido contra el Málaga y no teme que se produzca una desconexión con la afición en el tramo final del campeonato. "Siempre que vienes de una buena temporada, la gente nos exige lo máximo, es comprensible que nos quiera exigir cada día más y nosotros tenemos que verlo así. Pero este equipo siempre pelea para ganar y habrá días que nos salga mejor y otros peor", declaró.