El Celta vuelve a casa, donde más cómodo se siente últimamente, con la ilusión de sumar un triunfo que le mantenga vivo en la pelea por las plazas europeas. Cinco jornadas consecutivas acumulan los célticos sin perder en Balaídos. El último tropiezo en su estadio se produjo el 17 de diciembre, contra el Villarreal (0-1). Seis días después, los de Unzué visitaban Riazor con cierta sensación de despiste por los numerosos actos prenavideños que tuvieron que afrontar los jugadores celestes. Estos días, la inauguración de la sede del club vigués acaparó toda la atención de la entidad y de la afición. El duelo contra el Málaga (Balaídos, 18:30 horas, Bein LaLiga) pasó a un segundo plano. Sin embargo, Juan Carlos Unzué se muestra convencido de que nada distraerá a la plantilla ante la gran oportunidad que se le presenta a sus jugadores contra el colista de LaLiga para mantener vivo el objetivo de Europa. El equipo andaluz acumula trece jornadas sin ganar, sumando 2 de 39 puntos posibles y 3 goles a favor. Su último triunfo lo celebró el 10 de diciembre en Anoeta (0-2). Ni siquiera el cambio de timón en el banquillo, con la llegada de José González, en sustitución de Míchel González, ha surtido efecto en los blanquiazules para mejorar una trayectoria que parece abocada a Segunda División. De hecho, en la capital de la Costa del Sol se habla más de posibles entrenadores para intentar el reflotamiento del equipo que de los partidos que le restan de este curso.

A pesar de la complicadísima situación que afronta el equipo malagueño, los jugadores del Celta no se fían. Ese al menos fue el mensaje que durante la semana transmitieron los futbolistas desde A Madroa. Ayer también lo recalcó su técnico al concluir el entrenamiento en Balaídos. Otro detalle a tener en cuenta es que una de las tres victorias del Málaga durante esta temporada fue contra el Celta en La Rosaleda (2-1). La segunda llegó ante el Deportivo (3-2). Contra los equipos gallegos le ha ido bien al Málaga, al menos en la primera vuelta del campeonato.

La visita a Balaídos del cuadro malagueño trae buenos recuerdos a canteranos célticos como Iago Aspas y Hugo Mallo, que en 2012 debutaron en la máxima categoría contra el rival de hoy. El máximo goleador español de LaLiga le ha marcado en dos ocasiones al adversario de esta tarde. El moañés, que arrastra problemas en la rodilla derecha, se encuentra en condiciones de disputar la vigésimo novena jornada del campeonato.

No se ha recuperado a tiempo su compañero Daniel Wass, al que los médicos le detectaron una hernia discal que ya le privó de los partidos contra la UD Las Palmas y el Atlético de Madrid. El danés, sin embargo, mejora del problema lumbar y Unzué confía en que vuelva a los entrenamientos durante la próxima semana y que aproveche el parón liguero para ultimar la recuperación y volver con el equipo para el compromiso de San Mamés, a celebrar el sábado 31 de marzo.

Unzué ha convocado en esta ocasión a los 19 futbolistas disponibles, incluido Andreu Fontás. El catalán recibió el alta médica a principios de semana tras recuperarse de una lesión muscular. El once, sin embargo, podría ser el mismo que el del domingo pasado en el Metropolitano y con el que también salió el Celta ante la UD Las Palmas.

Unzué, como es habitual, no descarta introducir algún cambio, que podría afectar al eje de la defensa y al centro del campo, pues Emre Mor se postula de nuevo como titular, por lo que Pione Sisto volvería a sentarse en el banquillo. La segunda pareja más goleadora de LaLiga, formada por Aspas y Maxi Gómez, completará el ataque de un Celta que en sus últimos partidos en casa ha anotado un mínimo de dos goles por jornada.

Por detrás de los delanteros se situará Lobotka , que es fijo en el pivote, con Tucu Hernández y Brais Méndez, Radoja o Jozabed para completar el centro del campo céltico.

En la línea defensiva, Hugo Mallo y Jonny Otto son fijos en los laterales, con Sergi Gómez en el eje, al que acompañará Roncaglia o posiblemente Cabral. En la portería continuará Rubén Blanco.

Antes del partido, Unzué tendrá que realizar un descarte. Fontás se perfila como candidato a presenciar el partido desde la grada, como en las últimas jornadas antes de caer lesionado.

El Málaga, por su parte, viajó en la tarde de ayer a Vigo y José González también convocó a 19 futbolistas. En Balaídos no estará Samu García, por acumulación de tarjetas amarillas. También se quedaron en la Costa del Sol sus compañeros Adrián, Juanpi, Ricca, Kuzmanovic y Peñaranda, por lesión. Además, el técnico dejó fuera a Rolón, por decisión técnica.

El equipo malagueño ha modificado el plan de juego con José González. Busca balones largos para que sus delanteros aprovechen las segundas jugadas, así como las acciones por las bandas para buscar centros al área rival. Un fútbol más directo, con poca elaboración, con muchos jugadores de perfil atacante pero con poca pegada.

De hecho, el Málaga solo ha obtenido 16 goles en veintiocho jornadas de Liga, números que le convierten en el peor rematador del campeonato.

El equipo malagueño suma 13 puntos y se encuentra a 15 puntos de la salvación cuando le restan diez jornadas para tratar de arreglar una temporada nefasta.

El Celta, por su parte, vuelve a casa en busca de tres puntos que le den oxígeno en la carrera por alcanzar la sexta o la séptima plaza de la clasificación. Los de Unzué han sumado en Balaídos 11 de los 15 últimos puntos que ha disputado. Acumula ya tres meses imbatido en su estadio, que esta tarde rendirá un homenaje a la atleta de Riveira Ana Peleteiro. El celtismo, por su parte, prepara un recibimiento especial al equipo en las inmediaciones del estadio.