Esta noche se da una curiosa circunstancia en el Celta-Las Palmas y es que el equipo canario alinea en su ataque a Erik Expósito, bisnieto del primer jugador en marcar un gol en el estadio de Balaídos.

Graciliano Luis, bisabuelo del delantero canario, fue un jugador tinerfeño que militó en el Celta una sola campaña, la 1928-29 y participó en la goleada por 6-0 con la que el equipo vigués superó al Real Unión de Irún en el partido inaugural de Balaídos en diciembre de 1928. En aquella goleada Graciliano fue el primer jugador en marcar y su nombre quedó unido inevitablemente al coliseo vigués.

El tiempo ha querido que un bisnieto suyo, Erik, pise esta noche como titular el estadio que un antepasado suyo se encargó de estrenar en todos los sentidos.