Siete partidos sin ganar acumula el Celta B, al que este mediodía (Barreiro, 12 horas) se le presenta una nueva ocasión de romper la mala racha que inició con el nuevo año. Los célticos reciben en Barreiro al Cerceda, colista del grupo primero de la categoría de bronce. Brais Méndez aparece por segunda jornada consecutiva como refuerzo para los vigueses, que mantienen las ilusiones de engancharse a la pelea por los puestos de la promoción de ascenso a Segunda División.

El equipo que dirige Rubén Albés no gana desde hace dos meses, cuando el 10 de diciembre pasado superó por la mínima al Navalcarnero en Barreiro, a donde hoy regresan los celestes después de perder el derbi contra el Rápido de Bouzas, que disfruta de la segunda plaza en la clasifación.

Diez puntos separan a los célticos del cuarto clasificado, por lo que ha de comenzar a ganar de nuevo para intentar recuperar el terreno perdido. En 2018, el equipo vigués solo ha sumado tres puntos. El rival de esta mañana afronta una complicada situación. Su trayectoria en esta temporada resulta inexplicable. Después de iniciar el curso con una derrota, precisamente ante el Navalcarnero, encadenó cuatro triunfos. Y ahí agotó sus fuerzas. Desde entonces, el conjunto coruñés solo ha obtenido 5 empates, que le han llevado hasta la última posición. El Cerceda se encuentra a nueve puntos de la salvación. En su plantilla apareceden dos futbolistas con pasado celeste: el zaguero David Soto, que llegó a debutar en el primer equipo con Paco Herrera, y Youssef El Aoutani.

Albés, por su parte, ha convocado a todos los jugadores disponibles para enfrentarse al colista. La lista la forman Sotres, Jero, Kevin, Robert, Ros, Alomerovic, Iago, Pampín, Riki, Rai, Serrano, Brais, Molina, Tià, Agus, Pastrana, Aarón, Roigé, Juan Hernández, Drazic y Dennis. Solís y Alende son bajas por lesión.