Juan Carlos Unzué confesó ayer sentirse frustrado por el resultado de un partido que, en su opinión, el Celta debió resolver de forma holgada y que ha terminado con dos puntos volando de Balaídos. El entrenador celeste valoró la gran superioridad futbolística de su equipo durante todo el partido, pero lamentó que el Espanyol se hubiese llevado el empate con solo dos disparos contra la portería de Rubén Blanco.

"Ha sido tan simple como que el rival ha llegado dos veces y ha hecho dos goles y nosotros hemos llegado 16 o 17 chuts, por lo menos ocho de ellos claros, y sólo hemos sabido hacer dos, tan simple y frustrante como eso", indicó el preparador celeste a la conclusión del partido. Unzué reconoció que su equipo había cometido "errores puntuales" que le acabaron penalizando, pero que achacó a los riesgos que conlleva la presión adelantada que con tanta eficacia practican sus jugadores.

"Han sido "dos desatenciones en un partido de 90 minutos. No recuerdo más situaciones, prácticamente no les hemos dado opciones, son cúmulos de errores y de aciertos, hay cosas que mejorar en el aspecto defensivo, pero creo que es más mérito del rival que demérito nuestro. Nuestras ganas de presionar y de ser agresivos, algunas de estas se las va a llevar el rival", apuntó.

El técnico destacó la gran actuación del portero lucense Diego López como una de las claves del empate registrado ayer en Balaídos. "Ha tenido mucha importancia en el empate, pero para eso están los porteros. Ha tenido un gran día y no es una excepción, es un portero contrastado", observó.

A pesar del empate y de las victorias del Eibar y el Sevilla, que ganan terreno en la lucha por Europa, Juan Carlos Unzué resaltó que el juego de su equipo en el inicio de esta segunda vuelta invita al optimismo. "Soy optimista y los jugadores me dan motivos para serlo, me siento frustrado ahora mismo, pero mañana no les voy a poder decir otra cosa que este es el camino a seguir. De pie y a trabajar y a pensar en el Getafe", sentenció.

El entrenador del Celta reconoció que ve poco margen de mejora en el aspecto ofensivo, aunque sí en el defensivo, para evitar pequeños despistes por los que se sigue pagando un precio excesivo. "Somos un equipo de apretar arriba y somos equipo que nos podemos replegar a la contra. Es cierto que nuestra efectividad se nos complica cuando los equipos se nos repliegan. Creo que en el aspecto atacante no nos podemos quejar de nada y hay que seguir mejorando en el aspecto defensivo. Las desatenciones están siendo muy pocas, pero nos están penalizando mucho", comentó Unzué, que espera que su equipo tenga más continuidad en las próximas jornadas. "Si no somos capaces de enlazar, tres, cuatro, cinco resultados positivos nos va a costar mantenernos en este pelea. Pero yo soy optimista", dijo.