El jugador del Levante, Jefferson Lerma, aclaró el incidente con Iago Aspas a la emisora colombiana Bluradio. "Hubo una jugada anterior que le corto y cuando arranco a correr le doy en la cabeza y me reclama, le pregunto qué pasaba y es cuando me llama negro de mierda. Ahí perdí la cabeza y ya quería buscarlo, quería joderlo", explica. "Es algo que me tocó y es un gesto muy feo", señaló el futbolista.

Lerma recuerda que, tras recibir el insulto, le pega en el tobillo porque "ya no importaba lo que pasara". El árbitro le recriminó su actuación: "Cálmate, que se te ven las ganas de darle', 'me tienes hasta los cojones' y creo que en el acta ha puesto que no se entera que es algo que me parece desleal por parte del árbitro".

El colombiano añadió que no se arrepiente de lo sucedido y recriminó al delantero celeste haber negado el insulto: "Que me diga en la cara que no me lo dijo", resaltó.

"Yo no siento que esté dañando la imagen de una persona, él tiene que ser consciente de lo que ha dicho y hay que ser precavido en sus palabras, que después te pueden costar muchas cosas. Lo viví, me hirió y tenía que decirlo. ¿Por qué tengo que callar cosas feas de racismo que me dicen? Es la primera vez que me sucede", comentó.

Sin embargo, el propio Lerma ya recibió comentarios racistas anteriormente. "¡Que no le he dado, hostia! ¡Gilipollas! ¡Puto mono de mierda!", le habría dicho Dani Carvajal al levantinista en el partido que enfrentó al Real Madrid contra el Levante en septiembre, según recogió ´Mundo Deportivo´.