Rubén Albés seguirá como entrenador del Celta B hasta el mes de junio de 2019 tras firmar la renovación de su contrato. Junto a él también Toni Madrigal, que ejerce la función de segundo técnico polonga su relación con el club. El entrenador señaló ayer que "estoy donde quiero estar" y reiteró que "soy celtista y este proyecto me apasiona". Con su habitual cautela reconoció que "el primer objetivo es ganar el próximo partido en Pasarón ante el Pontevedra en el mes de enero. Pensar en otras cosas a medio plazo con este equipo sería un error". El Celta B ocupa la cuarta posición en la Segunda División B, lugar que otorga el derecho a disputar la fase de ascenso a la Segunda División A.

"Estoy sorprendido, ya que no es habitual que las renovaciones de entrenadores se produzcan antes de que termine un año natural. Todo lo contrario", señaló Rubén Albés. Insistió en que "me siento respaldado, valorado y apoyado por el club, la dirección deportiva y el vestuario. Estos detalles para mí tienen una gran importancia, al margen de los resultados futbolísticos".

El Celta B realizó una gran transformación en su plantilla el pasado verano. Su nuevo proyecto se basa en la juventud. El rendimiento de los que llegaron o se incorporaron de los juveniles ha sido extraordinario. A pesar de ello, Rubén Albés reitera que "seguimos en construcción, en tratar de mejorar cada día, en cada entrenamiento y en los partidos para progresar y corregir los defectos que podamos tener". Pero también reconoce que "tenemos una base y una identidad muy definida y clara". En ese sentido desvela que "la estabilidad defensiva" es una de las principales características y virtudes de su equipo.

El conjunto vigués ha marcado veinte goles en diecinueve jornadas. Es uno de los menos goleadores de las formaciones que ocupan las primeras posiciones de la clasificación. Un detalle estadístico para el que tiene una explicación: "Tenemos el control del juego a través de la posesión, pero es cierto que debemos mejorar en ataque. También es cierto que hemos sufrido lesiones y otro tipo de contratiempos. Es algo que estudiamos y analizamos con la mirada puesta en el futuro. Está claro que para marcar goles hay que tener situaciones de ventaja en ataque. En ello estamos".

Rubén Albés también destaca de su equipo "la gran capacidad para competir. Al margen de los resultados que se puedan obtener, los jugadores han demostrado su capacidad para afrontar los partidos con determinación. Es una de nuestras mejores cualidades y la hemos trabajado de forma intensa y constante".

Con el cuarto puesto en la clasificación, Rubén Albés se muestra cauto sobre las posibilidades de que su equipo alcance al final de temporada la clasificación para disputar la fase de ascenso. En ese sentido reitera que "sería un error pensar en el medio plazo. Vamos a seguir trabajando en un proyecto de cantera por el que siento una especial ilusión. Lo que tenga que llegar lo afrontaremos. Todos somos competitivos y queremos ganar. Pero con los pies en el suelo". El Celta B disputó la fase de ascenso la temporada pasada, pero no pudo conseguir su objetivo. Cuando se hizo cargo del filial el pasado verano Rubén Albés pidió tranquilidad para construir su proyecto sin marcarse grandes retos.