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La batalla gallega del gol regresa a Riazor

Aspas y Lucas, estrellas del Celta y el Deportivo, vuelven a verse las caras en un derbi

Iago Aspas toca el escudo del Celta tras anotar un gol. // Marta G. Brea

La resolución del derbi gallego va a depender en buena medida del estado de gracia del celeste Iago Aspas y el deportivista Lucas Pérez, delanteros de referencia y futbolistas franquicia de sus respectivos equipos. El moañés y el coruñés tienen mucho con común: los dos lideran el gol en sus respectivos equipos, ambos comparten una aventura fallida en Inglaterra de la que el céltico se ha recuperado mejor. Lucas sonó durante un tiempo como futurible de Vicente del Bosque para disputar con la selección la Eurocopa de Francia; Aspas se ha consolidado con Julen Lopetegui en la Roja en vísperas del Mundial de Rusia.

Los dos se identifican profundamente con los colores del club que defienden y del que son mayores exponentes: Aspas llegó al Celta con solo diez años y ha sido el atacante de referencia de todos sus equipos inferiores hasta su gloriosa irrupción en el primer equipo celeste en 2009 con dos goles salvadores al Alavés que lo convirtieron, desde su debut, en ídolo del celtismo; Lucas tardó bastante más en incorporarse al equipo de su ciudad. El punta deportivista se inició en el Victoria CF y pasó por las categorías inferiores del Arteixo, el Alavés, Órdenes y Atlético de Madrid antes de fichar por el Rayo Vallecano, equipo con el que debutó como futbolista profesional en Segunda División en el curso 2009-10, el mismo año en que Iago Aspas se incorporó al primer equipo del Celta.

Tras dos temporadas en el club franjirrojo Lucas probó fortuna en el extranjero: tres campañas en el Karpaty Lviv ucraniano y dos en el Dinamo de Kiev antes de fichar por el Paok Salónica, en el que permaneció otra temporada. En el curso 2014-15 se incorporó como cedido a la disciplina del Deportivo, con el que jugó 21 partidos y anotó 5 goles. Al final de aquella temporada, el club herculino lo adquirió en propiedad por 1,5 millones. Un negocio redondo.

Su segundo año en el Dépor fue también su mejor temporada como delantero. Anotó 18 goles (solo dos menos que Aritz Aduriz) que le acercaron a la selección española. Su gran temporada llamó la atención del Arsenal inglés, que lo fichó al inicio del siguiente curso por 10 millones de euros dejando huérfano el ataque herculino.

En su primer año en A Coruña, las cosas no le fueron muy bien a Lucas frente al Celta. No jugó por lesión en Balaídos -los de Berizzo se impusieron por 2-1 gracias a que Sergio detuvo un penalti a Mendunjanin en el descuento- y pasó inadvertido en Riazor, donde el Celta puso por primera vez una pica desde el año 2006 con goles de Charles y Larrivey.

La campaña 2015-16 fue la primera en la que el delantero coruñés se cruzó como enemigo con Iago Aspas. Y esta vez el Celta se topó con Lucas en estado de gracia. El goleador herculino no solo superó aquella temporada al artillero celeste en número de goles (17 por 14), sino que decidió el derbi de Riazor. Era la primera vez que ambos se veían las caras y el coruñés se llevó la partida anotando el gol que abrió el marcador. El segundo lo hizo en una mala entrega Jonny, en propia meta, forzado por el acoso del artillero deportivista. Fue la segunda derrota de la temporada de los celestes y la primera que el equipo de Eduardo Berizzo sufría a domicilio.

En la segunda vuelta, en Balaídos, las batalla se saldó en tablas. Más que por la actuación de Lucas y Aspas, el choque estuvo condicionando por la expulsión de Lux, que permitió al Celta jugar, sin aprovechamiento, 54 minutos en superioridad numérica. Ni Iago ni Lucas anotaron. Celso Borges abrió el marcador en el minuto 20 de y Nolito lo cerró 10 minutos después.

Aunque ambos futbolistas mantienen una encarnizada enemistad dentro del campo, fuera de los terrenos de juego han trabado una amistad que ha contribuido de forma decisiva a restar tensión al clásico gallego y que se ha estrechado en la selección gallega, donde Aspas y Lucas compartieron fatigas en el amistoso disputado en mayo de 2016 en Riazor contra Venezuela (1-1). El céltico anotó el gol de Galicia y protagonizó la anécdota de la noche al ser ovacionado por la afición local. El hombre más odiado por el deportivismo pasaba en un abrir y cerrar de ojos de villano a héroe por imponderables del fútbol. Fue la última temporada que ambos coincidieron sobre el verde.

La venta de Lucas Pérez al Arsenal al comienzo del siguiente curso dejó a Iago Aspas sin contrapeso en el clásico gallego. La marcha de Lucas Pérez al la Premier League coincidió con el mejor momento del delantero del Celta en la Liga española. En noviembre de 2016, Aspas fue convocado por primera vez por Julen Lopetegui con la selección española y los 19 goles que acreditaron al moañés como el mejor delantero español del curso le han afianzado en el equipo nacional con el Mundial de Rusia a la vuelta de la esquina. Fue también el año en que Aspas le tomó el pulso al derbi, con el que el moañés tenía una vieja cuenta desde que dejó en precario al Celta con aquel improcedente cabezazo a Marchena. Se desquitó con un doblete en Balaídos y puso luego patas arriba Riazor anotando el gol de la victoria en la segunda vuelta.

A Lucas las cosas no le fueron tan bien en el Arsenal. El coruñés disputó únicamente once partidos en la Premier en los que apenas anotó un gol, al Bournemouth. Dos importantes lesiones le restaron protagonismo. La falta de minutos en Inglaterra propició esta temporada su cesión al Deportivo, que ha pagado 4 millones por su cesión y asume la totalidad de su onerosa ficha.

En vísperas del primer derbi del curso, Aspas ha consolidado su posición en la selección española, vuelve a liderar el gol nacional en la Liga y superar con creces los números de Lucas, cuyo rendimiento no ha justificado por el momento el alto precio pagado por hacerse con sus servicios a préstamo. Aspas dobla sus números: 9 goles y 2 asistencias por solo 4 tanto un pase de gol de Lucas.

Iago Aspas

"Espero la victoria del Celta"

Iago Aspas se mostró ayer confiado en que el Celta se llevará el próximo clásico gallego en Riazor. Aprovechando al cita, el canal BEin Sports reunió al moañés con Lucas Pérez para charlar del partido tras un reportaje en el que se señalaban las semejanzas entre ambos y la importancia que cada uno tiene para su equipo y su afición.

En la entrevista no faltaron elogios mutuos. El delantero celeste destacó las cualidades como delantero de su rival destacando su dominio de los espacios "tanto cuando recibe el balón al pie como cuando tiene que buscar un desmarque de ruptura".

Aspas destacó la importancia del choque con la esperanza de repetir su buena actuación en el derbi de la pasada temporada, en la que anotó dos goles en Balaídos y el tanto que dio al Celta el triunfo en Riazor.

"El año pasado les ganamos los dos partidos, vamos a ver este año", indicó el artillero morracense, que prefirió no hacer un pronóstico sobre el resultado. "Yo espero la victoria del Celta, no te voy a decir que quiero perder", manifestó el futbolistas celeste.

Lucas Pérez

"Quiero un 2-0 y que luego venga Papá Noel"

Lucas Pérez se mostró orgulloso ante las cámaras de BEIn Sport de su decisión de recalar esta temporada cedido en el equipo de su ciudad, al tiempo que restó importancia a su fallida aventura en el Arsenal, pues considera que, con el tiempo, tanto él como Iago Aspas habrían acabado cuajando en el fútbol inglés. "La vida de un futbolista no siempre va para arriba, a veces se estanca o va para abajo, pero estoy seguro de que habríamos ido a más porque cuando estás en un equipo con grandes jugadores siempre acabas mejorando", argumentó. Pérez tampoco escatimó elogios hacia Aspas. "Está en el mejor momento de su carrera, es un delantero muy completo que ha mejorado mucho", dijo. E ironizó: "En el derbi no va a marcar. Que marque en otros partidos, si quiere, que la pasada temporada ya marcó tres". El punta coruñés consideró normal que a Aspas se le pite en Riazor. "Se le pita a los mejores, a Messi y a Cristiano también; y cuando viene a Coruña también se le pita a él," bromeó Lucas, que pronosticó un triunfo local: "Espero que ganemos 2-0, venga Papa Noel y nos tomemos tranquilos las uvas".

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