Emre Mor se mostró ayer convencido de que su momento en el Celta no tardará en llegar. El fichaje más caro de la historia del club no alberga dudas de que pronto tendrá minutos para poner su talento al servicio del equipo, con el que confía crecer como futbolista en la Liga española. "Sólo pienso en triunfar aquí", sentenció ayer en rueda de prensa.

Mor restó importancia al interés que algunos importantes equipos turcos, como el Besiktas o el Fenerbahçe han mostrado por contratarlo y recordó que fichó por el Celta porque cree que el club vigués es el que más puede ayudarle a crecer como futbolista. "Este interés ya existía antes de fichar por el Celta y la situación no ha cambiado. Vine aquí para jugar en la Liga española y porque pensaba que era el mejor equipo para crecer en mi carrera. No pienso en otra cosa que en quedarme aquí", afirmó.

El internacional turco confesó que en sus primeros cuatro meses en Vigo no ha jugado tanto como esperaba, pero atribuyó la falta de minutos a las dificultades propias del proceso de adaptación "a un nuevo país y un nuevo fútbol", que se complicado por una lesión de tobillo que lo mantuvo un mes fuera de juego. "Me habría gustado jugar más pero ha sido un periodo difícil. Vine lesionado y me costó un poco coger la forma; poco después volví a lesionarme y estuve un mes parado. Pero ahora estoy bien, feliz, y me entreno duro a la espera de una oportunidad", destacó. Y precisó: "La lesión frenó mi puesta a punto y luego he tenido que pasar un periodo de adaptación. Tengo 20 años y he cambiado de fútbol, de país, de hogar y esto requiere tiempo. Pero ahora me encuentro bien y trabajaré duro para jugar más".

El joven atacante, de 20 años, reveló que ha hablado de su situación con el entrenador, Juan Carlos Unzué, y que éste le ha pedido que sea paciente. "He hablado con el míster y me ha pedido que tenga paciencia, así que tengo que seguir su consejo y trabajar duro en los entrenamientos, día a día. Confío en el técnico y él confía en mí y espero que esto se pueda ver pronto en el campo", dijo.

La oportunidad, podría llegarle este mismo domingo, en el compromiso liguero que el Celta disputará en Balaídos ante el Villarreal. La baja por sanción de Iago Aspas libera una plaza en el flanco derecho del ataque que Mor tiene muchas opciones de ocupar. "Yo quiero jugar pero depende del míster, él tiene que tomar la decisión. Si no juego este fin de semana tampoco pasa nada, seguiré trabajando igual que hasta ahora", apuntó.

Emre Mor aseguró, por otra parte, que no se siente especialmente presionado por el alto precio de su fichaje. "La presión siempre está ahí cuando vienes de un club tan importante como el Borussia Dortmund. Claro que me importa lo que piensa la gente, pero lo importante es cómo me encuentre yo porque sólo tengo 20 años. La gente cree en mí y necesito tiempo. El fútbol de España es diferente al de Alemania. Allí el fútbol es más físico y se corre más, aquí es más técnico, y creo que eso a mí me beneficia", indicó.