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El Celta juega con el balón en la cabeza

El equipo de Unzué es el mejor rematador con la testa de la Liga - Suma 8 tantos en jugadas aéreas, que suponen el 34,7 por ciento de su producción total - También destaca en goles de cabeza en contra, con 6

Emre Mor, junto a Stanislav Lobotka y Wass, ayer, al iniciar el entrenamiento en A Madroa. // Marta G. Brea

El remate de cabeza es uno de los recursos que mejor aprovecha el Celta para superar las porterías rivales. Los de Unzué se muestran como unos consumados especialistas en resolver a su favor estas jugadas con la testa, pero a la vez muestran gran debilidad para defenderlas en campo propio Así, los célticos lideran la clasificación de goles a favor con la testa, con 8, pero también ocupan los primeros lugares en cuanto a los encajados, con 6. Se puede subrayar, en este caso, que el Celta juega con el balón en la cabeza, tanto en su propia área como en la ajena.

El equipo celeste va camino de alcanzar la marca de 27 goles de cabeza que el Real Madrid estableció la pasada temporada. Los de Unzué acumulan 8 tantos en 12 jornadas (en casi un tercio del campeonato). Si mantienen esa progresión, al concluir la temporada podrían mantenerse en torno a los 25 goles de cabeza.

El equipo de Zinedine Zidane contaba entonces con consumados especialistas en el juego aéreo, como Cristiano Ronaldo, Sergio Ramos, Morata o Pepe. El Celta, en cambio, destaca más por pericia que por fortaleza en el remate o en el salto. También influye en este apartado el acierto de Pione Sisto en los centros al área rival. El danés destaca este curso por su facilidad en dar asistencias de gol: es el más sobresaliente de LaLiga y de los otros cuatro principales campeonatos de Europa, con 9.

De los centros medidos de Pione Sisto o de los saques de esquina de su compatriota Daniel Wass sabe aprovecharse el Celta, que contabiliza un total de 23 goles a favor, de los que 8 (el 34,7 por ciento) han sido de cabeza.

Maxi Gómez, máximo goleador del conjunto celeste en este inicio de temporada, destaca asimismo como rematador de cabeza: contabiliza 3 de sus 7 goles. De la facilidad con la que los de Unzué marcan con la testa también se aprovecha un futbolista que apenas sobresale en esta suerte de remates: Iago Aspas. El moañés ha anotado 2 de cabeza de los 6 que acumula en Laliga. Los tres restantes llevaban la firma de Cabral, Sergi Gómez y Pione Sisto, quien se aprovechó de un gran centro de Wass para marcar de esta forma ante el Girona. Eibar, Sevilla, Málaga, Betis y Alavés también aparecen como víctimas de esta nueva especialidad del Celta, que sobresalió ante Athletic Club con dos goles (Aspas y Sergi Gómez). Respondían así los célticos de la misma forma que suelen hacerlo los vascos con sus rivales, aprovechando su característico poderío aéreo.

El Celta comparte esta privilegiada situación con el Betis, que también ha obtenido 8 goles de cabeza. Por detrás se sitúa el Valencia, con 7. Los béticos lideran la tabla en cuanto a goles de cabeza en contra, con 7. Le siguen el Celta y la UD Las Palmas, con 6 cada uno.

A los de Unzué les sorprendió el sábado pasado el Sevilla, en un partido en el que los tres goles fueron de cabeza. Primero marcó Maxi Gómez, su tercer tanto con la testa. Después llegaron los remates certeros de Muriel y del excéltico Nolito.

Ayer, Pablo Hernández lamentaba que la victoria en el Sánchez Pizjuán se le escapase al Celta después de adelantarse en el marcador. Dos centros desde el costado derecho del ataque del equipo sevillista acabaron en goles de cabeza. "Son errores que no se puede cometer", señaló el centrocampista tucumano.

Lo que el Celta gana en el área rival lo despilfarra en la suya, aunque el balance de goles, por el momento, es positivo para el equipo de Unzué, que sin embargo no sabe cómo rentabilizar ese caudal rematador. Es el cuarto máximo goleador de LaLiga, con 23 tantos -tras Barcelona, Valencia y Real Sociedad-, pero le penalizan en exceso los 19 encajados. De esos, 6 son de cabeza, casi un tercio del total (31,5 por ciento).

Ahora que saben cómo explotar los remates de cabeza, los de Unzué necesitan asimismo encadenar puntos que les lleven a la zona noble de la clasificación. Por el momento ya han sumado más goles de testa en doce jornadas que durante toda la temporada pasada y la anterior, donde contabilizaron 7 y 3, respectivamente.

Se encuentran también con posibilidades de superar las cifras de los dos años anteriores en cuanto a goles de cabeza en contra. El curso pasado encajaron 14 y hace dos años, 11. Ahora contabilizan 6, pero aún restan dos tercios de campeonato y el Celta de Unzué juega con el balón en la cabeza.

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