El Celta aportará previsiblemente entre cuatro y cinco futbolistas al próximo Mundial de Rusia en función de si en las próximas semanas se materializa, como apuntan todos los indicios, la venta del uruguayo Maxi Gómez a un club de la liga china. Si las lesiones no lo impiden y los seleccionadores mantienen sus planes, al menos cuatro jugadores del Celta (Iago Aspas, Pione Sisto, Nemanja Radoja y John Guidetti) representarán el próximo verano al club vigués en Rusia defendiendo los colores de España, Dinamarca, Serbia y Suecia, respectivamente.
Será el segundo mayor aporte de jugadores a la Copa del Mundo en la historia del club después del Mundial de Corea y Japón 2002, al que el Celta contribuyó nada menos que con siete internacionales: Gustavo López y Pablo Cavallero (Argentina), Valeri Karpin y Alexander Mostovoi (Rusia), Juanfran García (España), Benni McCarthy (Sudáfrica) e Iván Kaviedes (Ecuador), aunque este último jugaba cedido en el Valladolid.
El equipo celeste no aportó ningún jugador a los dos siguientes campeonatos mundiales, Alemania 2006 y Sudáfrica 2010, pero sí lo hizo en Francia 1998, donde estuvo representado Goran Djorovic (con la extinta Yugoslavia) y el defensa central noruego Dan Eggen.
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El nigranense Jorge Otero y el portero manchego Santiago Cañizares fueron los representantes del conjunto vigués en el Mundial de Estados Unidos 1994 impulsados por el buen papel del cuadro celeste en la Copa del Rey, mientras que el argentino Augusto Fernández y el chileno Fabián Orellana constituyeron la embajada celeste en Brasil 2014.
Con anterioridad al año 1994, solo un jugador del Celta participó en la Copa del Mundo de fútbol: el defensa guipuzcoano Gabriel Alonso. Fue en 1950, en Brasil, donde la selección española alcanzó la cuarta posición, su segunda mejor clasificación, tras eliminar a Inglaterra con el famoso gol del Telmo Zarra. Alonso, que dos años antes había sido clave para alcanzar la primera final de Copa del Rey, disputó seis partidos. España fue cuarta.
A lo largo de la historia, el Celta ha estado representado en el principal torneo futbolístico del planeta por un total de catorce jugadores. Los cuatro o cinco que jugarán el próximo Mundial de Rusia suponen un tercio de todos los que han jugado en las veinte ediciones del torneo y son un claro síntoma de la actual pujanza deportiva del conjunto vigués,
La mayoría de los mundialistas celestes son internacionales de nuevo cuño y, salvo Iago Aspas, al que la llamada de la selección le ha llegado en plena madurez, muy jóvenes. El moañés acaba de cumplir un año como internacional y suma seis convocatorias consecutivas y siete partidos con Julen Lopetegui, aunque solo ha sido titular en el amistoso recientemente disputado contra Colombia. A pesar de ello, el canterano será el mejor exponente del Celta en Rusia y el tercer jugador formado en la casa que disputa el torneo después de Jorge Otero y Míchel Salgado, aunque a este último alcanzó la internacionalidad con el Real Madrid.
John Guidetti suma bastante más tiempo como internacional absoluto con Suecia. El céltico debutó frente a Croacia en febrero de 2012 con apenas 19 años, aunque su siguiente encuentro, no lo disputó hasta 2015, un amistoso ante Francia, y el tercero, de clasificación para la pasada Eurocopa, frente a Liechtenstein, le llegó ya con el Celta. Desde entonces ha jugado 14 partidos más con el equipo nacional, cuatro de ellos en el último Europeo. Su participación en los partidos de clasificación mundialista ha sido más bien escasa.
El centrocampista Nemanja Radoja, por su parte, lleva apenas dos encuentros como internacional absoluto con Serbia, un amistoso ante Ucrania y otro de clasificación para el Mundial contra Moldavia. La lesión sufrida a comienzos de temporada le ha impedido ser convocado para los últimos partidos de clasificación mundialista con el combinado balcánico.
Pese a debutar con solo 20 años con Morten Olsen en partido oficial ante Albania en septiembre de 2015, ha sido el actual seleccionador danés, Äge Hareide, el que ha dado galones a Pione Sisto con Dinamarca. El extremo celeste ha sido, de hecho, una pieza clave en la presencia del equipo escandinavo en Rusia, tanto en la fase de clasificación, donde ha sido titular en cuatro de los últimos cinco partidos, como sobre todo en la eliminatoria de repesca frente al Irlanda, especialmente en el segundo asalto de la eliminatoria, con dos asistencias en la histórica goleada (1-5) firmada contra los de Martin O'Neil.
Wass
El relevo en la dirección del equipo danés tras las pasada Eurocopa ha sido una bendición para Sisto, que se ha consolidado como titular en el grupo que acudirá a Rusia, y un mal sueño para el céltico Daniel Wass, habitual en las convocatorias de Olsen y del que Hareide ha prescindido generando todo un debate en el país. El centrocampista del Celta se mostró ayer satisfecho por la clasificación mundialista de Dinamarca y confesó que le gustaría defender los colores de su país el próximo verano en Rusia, aunque reconoció que no tiene demasiadas esperanzas de volver a ser convocado.
Wass pasó de puntillas sobre su conflicto con Hareide. aunque reconoció que su negativa a ser convocado la pasada temporada le pasó factura en su relación con el técnico. Otra de las razones del desencuentro, según apuntó la prensa danesa, es la negativa de Wass a jugar como lateral derecho, posición en que pretendía utilizarle el seleccionador.
El quinto y más reciente mundialista céltico, si finalmente sigue en el equipo después del mes de enero, es el uruguayo Maxi Gómez, que acaba de cumplir el sueño de debutar con el combinado charrúa en un doble compromiso amistoso contra Polonia y Austria. Impulsado por su fulgurante debut goleador con el Celta, Maxi ya había sido convocado anteriormente por Óscar Washington Tabárez, para los partidos del grupo sudamericano contra Venezuela y Bolivia, pero no dispuso de minutos.
