La penúltima sesión de trabajo semanal del Celta celebrada ayer a puerta cerrada en A Madroa ha proporcionado buenas noticias a Juan Carlos Unzué en torno a la evolución física de Hugo Mallo y Emre Mor que, si nada se tuerce en las próximas horas, estarán disponibles para el duelo contra el Atlético de Madrid mañana en Balaídos. Para este choque es baja segura Facundo Roncaglia, en proceso de recuperación de una lesión muscular en el muslo derecho y existe la duda de si el técnico podrá contar con Gustavo Cabral, aquejado de un proceso gripal.

El entrenador del Celta contaba con la recuperación de Mallo para el partido. La evolución de su lesión ha sido buena desde el primer momento y hacía un par de días que el capitán celeste se entrenaba a buen ritmo con el grupo y con igual intensidad que sus compañeros. El lateral marinense recibió ayer el alta médica, con lo que su presencia en el once que Unzué desplegará mañana frente a los colchoneros puede darse por segura.

La lesión de Mallo, sumada a la de Roncaglia, obligó el preparador celeste a improvisar una defensa de circunstancias en el partido contra Las Palmas del pasado lunes en el Estadio Gran Canaria, donde Daniel Wass tuvo que actuar como lateral derecho.

Salvo contratiempo de última hora, todo parece apuntar a que Unzué podrá disponer para el choque del internacional turco Emre Mor, cuyo concurso contra los colchoneros estaba estos días en el aire por culpa del esguince de tobillo sufrido por el atacante en el partido contra los grancanarios.

Tras entrenarse un par de días en solitario en el gimnasio, Mor reinició ayer el trabajo con el grupo con intensidad, completando sin problemas prácticamente toda la sesión, y es previsible que hoy reciba el alta médica, lo que le abriría al menos un hueco en la convocatoria. Después será Unzué el que valore la conveniencia de emplearlo o no como titular considerando tanto su estado físico como las ventajas e inconvenientes de repetir alineación. El técnico debe decidir si juega ante los de Diego Simeone con Aspas en punta y el turco en banda derecha o bien despliega al moañés en el costado derecho del ataque y sitúa en punta a Maxi Gómez, sancionado en el partido contra los grancanarios.

Descartado Roncaglia, la única duda con que cuenta Unzué es si podrá disponer de Gustavo Cabral, enfermo de gripe. Lo más probable es que el técnico apure la situación hasta el mismo domingo para ver si el central mejora y llega al partido en condiciones de vestirse de corto. Por otra parte, la sanción impuesta a Rubén Blanco permitirá a Iván Villar sumar su primera convocatoria con el equipo.