La Liga de Fútbol Profesional quiere cuidar al detalle las retransmisiones de los partidos y que las imágenes reflejen la popularidad del deporte rey de masas, aunque cada vez sean más los aficionados que renuncian a pagar precios desorbitados por las entradas a los estadios. A los clubes se les considera responsables de que no se llenen las gradas, pues son los que fijan los precios de los abonos, aunque no los días y horarios de los partidos. Balaídos ha bajado en afluencia de aficionados y de ello toman buena nota los enviados de la Liga, que ha abierto un expediente sancionador contra el club vigués por no alcanzar el 70 por ciento de aforo exigido como mínimo en el partido contra el Alavés. Desde Plaza de España aseguran desconocer la multa a la que tendrán que hacer frente por dejar vacíos más del treinta por ciento de los asientos de las gradas de Tribuna Alta y Baja, hacia las que enfocan las cámaras de televisión durante las retransmisiones deportivas.

La noticia sobre la multa al Celta la difundió ayer Libertad Digital y la recogieron otros medios de comunicación, sin que desde el Celta hubiese respuesta para conocer la cuantía de la sanción económica.

El club, sin embargo, ha comenzado a tomar medidas para paliar en la medida de lo posible el bajo aforo que se registra en la grada de Tribuna. De hecho, ha rebajado los precios de las entradas para el partido de mañana contra el Getafe (Balaídos, 21 horas).

Entre 10 y 40 euros son los precios que ha puesto el Celta para acudir al duelo con el equipo madrileño recién ascendido a la máxima categoría. Los boletos para los aficionados menores de 25 años (sub-25) oscilan entre los 10 y los 25 euros. Los adultos podrán retirar entradas al precio de 15 o 40 euros, dependiendo de la grada elegida.

El club vigués intenta así paliar la baja asistencia de público que se viene registrando en Balaídos y que mañana podría ser incluso más acusada debido al horario del partido y al mal arranque de Liga del equipo de Unzué.