El mal partido del Celta se personificó en Jozabed de forma notoria en lo que respecta a la imprecisión en el pase. Una suerte que el andaluz suele manejar a la perfección. Ayer, sin embargo, cometió varias pérdidas al comienzo y ya no fue capaz de encontrar la continuidad en el juego. No fue el único, claro, ya que tanto los centrales como los demás centrocampistas estuvieron especialmente desnortados.

El jugador del Celta afirmaba que dieron facilidades al rival. "El peligro del Espanyol vino con errores que no se pueden cometer", admite. "Los goles de ellos eran evitables. Hay que estar más atentos. Todos, desde los de arriba hasta los de atrás. Y también tenemos que aprovechar las oportunidades que tenemos". No cree, sin embargo, que el Celta tenga que replantearse la naturaleza de su propuesta futbolística. "Hoy nos penalizó el salir jugando desde atrás porque tiene sus riesgos, pero muchas veces nos salió bien", indica.

Nadie en el Celta, a pesar por ejemplo de que el primer gol del Espanyol estuvo precedido de un fuera de juego de Gerard Moreno, quiso ponerle paños calientes a la evidencia de su mal juego. Iago Aspas reconocía que el Celta no tuvo un buen comienzo: "Nos costó mucho entrar en el partido. Salimos muy mal, tampoco hay que echar la culpa al árbitro. No ha podido ser, no hemos hecho un buen partido, esa es la conclusión".

Decía el delantero del Celta que los errores son consustanciales a los partidos, sin querer darle una impresión de mayor gravedad a lo sucedido durante el partido o a la situación del Celta en la Liga. "Los fallos nos han cogido así y no se puede hacer nada, son cosas que pasan", comenta. "Tenemos que volver a la senda de la victoria delante de nuestra gente y seguro que lo conseguiremos".