El Celta reanudó ayer el trabajo en A Madroa con una doble sesión de entrenamiento, en la que no participaron los centrocampistas Pape Cheikh y Álex López, pues ambos arrastran problemas físicos, por lo que es improbable que ambos participen en el compromiso de mañana ante el Udinese italiano (Balaídos, 19.30 horas).

Pape sufre una elongación en el bíceps femoral derecho. desde el pasado 2 de agosto, cuando el equipo se encontraba concentrado en Inglaterra. Álex López, por su parte, está aquejado de un leve esguince en el ligamento interior de la rodilla derecha, que también se produjo el miércoles de la pasada semana. Ambos permanecieron en el gimnasio mientras el resto de la plantilla realizó una suave sesión a primera hora de la mañana. Tras una breve charla de Unzué en una esquina del campo de entrenamiento, los jugadores se repartieron en grupos para realizar varias series de rondos. Una parte prolongó el entrenamiento para participar en un partidillo a mitad de campo.

Los célticos completaron la jornada de trabajo con una sesión vespertina, después de disfrutar del domingo libre. El equipo regresó el sábado a Vigo tras diez días de concentración en tierras inglesas, donde disputaron dos amistosos (Brentford y Burnley). El viernes partieron para Alemania, donde el sábado se enfrentaron al Bayer Leverkusen. Ahora, los de Unzué preparan la cita de mañana ante el Udinese y el domingo contra la Roma.