España y Colombia empataron 2-2 en una noche amarga para Pepe Reina, que falló en los dos goles del conjunto de José Pekerman, en el que Morata igualó en los últimos instantes y que sirvió para que Iago Aspas se estrenase como titular en el equipo nacional. Tras sus apariciones desde el banquillo, el moañés dio un nuevo salto hacia adelante con su entrada en el once inicial. Y no desaprovechó la ocasión. Durante los 55 minutos que estuvo en el campo fue de lo mejor de la selección, asociándose de forma insistente con David Silva y disfrutando de un par de ocasiones que desaprovechó por poco. Ubicado en la punta, aunque con tendencia a caer a la banda derecha, Aspas demostró que habla el mismo idioma que buena parte de sus compañeros de equipo. Gana peso en la selección.

España y Colombia disputaron un partido extraño, lleno de detalles. Por momentos no pareció un amistoso. Hubo mucha intensidad por ambas partes, muchos palos innecesarios y ganas de varios jugadores de buscar una reivindicación. Ese fue el caso de James, que la consiguió.

Pero el choque, como todos, tuvo una víspera. Y como pasa con España últimamente, el día antes estuvo marcado por un tema relacionado con Piqué. Hubo división de opiniones, pero claro, los pitidos se amplifican en un estadio. Y Piqué los escuchó durante casi toda la primera parte. Cada balón que tocaba, una pitada.

En otra dimensión quedaron otras historias, como la alineación de Julen Lopetegui, con seis jugadores menos habituales para dar minutos a casi todos antes de la importante cita de Macedonia, o la reaparición de Radamel Falcao después de más de dos meses y un par de encuentros ausente con Colombia por lesión.

Aunque el duelo comenzó con poco ritmo, poco a poco España se fue entonando al ritmo de David Silva y de Iago Aspas. Suya fue la primera ocasión, un triple remate ante David Ospina después de un buen pase entre líneas de Andrés Iniesta. Fue el primer aviso de Silva, que después sí acertaría tras acariciar con su bota izquierda un buen centro de Pedro.

En medio de ese juego excesivamente intenso, y tras el gol de Silva espoleado por un eléctrico Pedro, apareció el primer error de Reina, que dio vida a Colombia. Una mala salida del portero del Nápoles permitió a Cardona empatar con una vaselina que no pudo evitar Piqué.

Reina adquirió un protagonismo inesperado en medio de un guión que siguió escribiendo en la segunda parte con otra mala salida que sirvió a Falcao para hacer el 1-2 tras un centro magnífico de James desde el córner. El efecto de la pelota pudo con Reina y, de nuevo, erró y Colombia se puso por delante.

En ese momento, Lopetegui ya había sacado al campo a Saúl Ñíguez, Marco Asensio y Nacho Monreal. Después, saldrían Morata y Deulofeu. España era otra, y con Piqué con el brazalete de capitán. Para rizar el rizo, lo fue durante diez minutos, hasta que fue sustituido. Se fue con división de opiniones. España insistió y a última hora se encontró con el gol salvador de Morata.