Sergio Álvarez confirmó en su partido cien como celeste su gran momento de forma en un día especial por la despedida a Eduardo Berizzo pero en el que el portero de Catoira volvió a brillar con dos excelentes paradas frente a un adversario de rango europeo. El "centenario" del guardameta refrendaba también el peso que la cantera ha tenido en el equipo celeste desde la llegada al banquillo de Eusebio Sacristán, que se ha mantenido luego con los sucesivos técnicos que han dirigido al equipo en la máxima categoría.
Paco Herrera ascendió al Celta con ocho futbolistas gallegos en el equipo titular y el protagonismo de los canteranos se ha mantenido con Abel Resino, que hizo debutar a Rubén Blanco y Madinda; Luis Enrique, con quien se estrenaron David Costas, Javi Rey o David Goldar y que dio continuidad a Santi Mina; y Berizzo, responsable del debut de chicos como Borja Fernández Borja Iglesias, Samu, Diego Alende, Pape Cheikh y, esta última temporada, también de Iván Villar.
Pero más que el número de futbolistas que han debutado, el protagonismo de la cantera se mide con el número de jugadores formados en las categorías inferiores que forman parte habitualmente de las alineaciones del primer equipo. Con Luis Enrique llegaron a juntarse ocho en alguno de los partidos de la segunda vuelta, aunque el número final se situó en seis, es decir, casi el 60 por ciento del equipo titular.
Desde la llegada de Berizzo al banquillo hace tres temporadas, el número de canteranos fijos en el primer equipo se ha reducido, aunque no de modo considerable. Esta temporada, sin ir más lejos, los chicos de la cantera representaban más del 40 por ciento del equipo tipo que el preparador argentino hizo consolidarse en la Liga y, posteriormente, en la Copa de Rey y la UEFA Europa League.
Dos de los hombres más decisivos en la pasada temporada han sido precisamente dos canteranos: Iago Aspas, el goleador del equipo, y Sergio Álvarez, que aprovechó la recaída en una lesión de Rubén Blanco para consolidarse en el equipo titular cuando se le daba ya por muerto. La participación de los cuatro canteranos ha sido más que notable el pasado curso en las tres competiciones disputadas por el equipo: Sergio jugó 3.990 minutos, el capitán celeste, Hugo Mallo, 3.648, Jonny 3.946 y Iago Aspas 3.607. El moañés ha acabado el curso como el máximo goleador español de Primera División (19 tantos, a los que hay que añadir otros 5 en la Europa y dos más en la Copa del Rey) pero también ha sido el futbolista de la Liga con más peso en los goles marcados por su equipo al conseguir el 45,5 de los goles anotados por el Celta la pasada temporada. Aunque es el más joven de los cuatro, el futbolista formado en A Madroa que acumula más experiencia con el primer equipo es el lateral Jonny Castro. El de Matamá debutó con Paco Herrera por la lesión de Mallo y ha tenido un notable protagonismo con Luis Enrique y Berizzo en los últimos cuatro años.
