El Celta B mantiene vivo su sueño en la fase de ascenso a Segunda División gracias a su instinto de supervivencia. El filial celeste tendrá que remontar en el partido de vuelta ante el Valencia Mestalla después de caer esta mañana en Barreiro (2-3) por un tanto de diferencia. Un gol de penalti de Borja Iglesias en el último minuto mantiene la eliminatoria abierta después de que los celestes la tuviesen casi perdida con un contundente 1-3 .
Alejandro Menéndez apostó de inicio por la velocidad de Juan Mera y Juan Hernández en el centro del campo, junto a Gus Ledes y Borja Fernández; en lugar del control que le podría haber ofrecido la presencia Brais Méndez. El Celta B quería aprovechar su pegada a la contra para sorprender a un Valencia mucho más fuerte en la medular gracias a las figuras de Nacho Gil y Quim Araujo.
El planteamiento no le pudo salir mejor en el arranque al técnico celeste. En dos minutos Borja Iglesias dio el primer aviso y Juan Mera sorprendió al portero valencianista con un gran disparo que significó el primer tanto del encuentro. Pero todo fue un espejismo. El filial ché, dirigido por el exjugador Curro Torres, tomó las riendas del juego e hizo desaparecer poco a poco al Celta. Los vigueses sufrieron tanto por el centro, donde Gus Ledes y Borja Fernández perdían casi todas las batallas, como por las bandas, terreno en el que los ofensivos laterales visitantes camparon a sus anchas.
Con el conjunto vigués agazapado, el Valencia Mestalla le dio la vuelta al marcador con dos rápidos zarpazos. A los 26 minutos una gran jugada de los valencianistas por la banda izquierda terminó con una dejada de tacón en la frontal para que Quim Araujo soltase un zapatazo al fondo de la red. Casi sin tiempo para digerir el primer golpe, el Celta B recibió otro mazazo con otro lanzamiento lejano muy colocado, esta vez de Nacho Gil, que batió a Néstor. Los celestes respondieron al asedio visitante comandados por el arrojo de Borja Fernández, que trató de echarse el equipo a la espalda. De sus botas salieron las dos acciones que terminaron en sendas oportunidades para Hicham. En la primera se encontró con el portero del Mestalla y en la segunda no llegó a conectar con un buen centro de Borja Iglesias. Antes del descanso el cuadro de Curro Torres volvió a meter el miedo en el cuerpo a los vigueses con un chut desde el vértice del área del lateral Nacho Vidal.
En los primeros compases del segundo tiempo estuvo la clave para que cambiase la dinámica del choque. A los cinco minutos de la reanudación un libre directo botado por Borja Igleasias se estrelló contra la madera. Pero el Celta B, cuando más cerca estuvo de empatar, se encontró con el varapalo definitivo. Gregorio Sierra conectó un cabezazo en el primer palo a la salida de un córner e hizo el tercero para los valencianistas. A partir de ahí el conjunto ché se dedicó a administrar una ventaja que le permitirá afrontar con muchas garantías el encuentro de vuelta de la semana que viene. El Celta B intentó volver a meterse en el partido. Entró Brais Méndez y la escuadra de Menéndez recuperó la posesión de balón. El Valencia, por su parte, vivía de las contras que generaban el corpulento Rafa Mir, el veloz Sito y en los últimos minutos Jordi Sánchez. Con más coraje que juego, Hicham y Borja Iglesias lo intentaron con dos tímidos acercamientos y el propio delantero marroquí, en el minuto 90, reventó una volea contra el larguero después de un saque de esquina. Sin embargo, cuando más negro parecía el horizonte, el Celta B tiró de "afouteza" en el tiempo de descuento. Brais Méndez forzó un penalti del portero visitante después de una jugada loca en el interior del área del Valencia y Borja Iglesias, el máximo goleador de los cuatro grupos de Segunda B, no perdonó desde los once metros. Un gol que volvió a abrir la eliminatoria y convierte la remontada del próximo fin de semana en tierras valencianas en una gesta más asequible.
