Iago Aspas jugó toda la segunda parte y aprovechó la ocasión para sumar el decimoctavo gol en esta Liga y se consolida como el mejor rematador español, por lo que es el máximo candidato a llevarse el premio Zarra.

Ayer volvió a intentarlo de todas las maneras, con tiros que pasaron rozando los palos o que pusieron en apuros a Pacheco. Sin embargo, el moañés encontró el premio desde el punto de penalti. Y desde los once metros es infalible en la máxima categoría.

Suma 9 penas máximas en Primera y todas acabaron en gol para el Celta. De esta forma, Aspas se ha convertido en el tercer céltico que más goles ha anotado de penalti en Primera División, tras Gudelj y Herrerita, que consiguieron 14 y 11, respectivamente.