José Mourinho mantuvo ayer el tono bajo y cordial que ha escogido para su discurso en esta eliminatoria. Solo entra en réplica cuando un periodista local le habla de la Europa League como el segundo posible título de la temporada. "Sería el tercero", corrige, pensando en la Community Shield y la Copa de la Liga.

Renuncia incluso a la exaltación de su carrera personal. "No estoy pensando en mí mismo, estoy pensando en el club y en los jugadores", indica sobre la importancia de lo que se avecina. "Para el club sería muy importante estar otra vez en una final europea y luchar por ganar un trofeo que nunca antes ha ganado. Y solo un pequeño grupo de jugadores que lleva mucho tiempo en el club, como Rooney, Young y Carrick, conoce el éxito en Europa, además de Mata en otros clubes. Nadie más lo ha logrado antes en la plantilla. Así que sería importante para el club y para los jugadores", resume. Y recuerda: "Será el partido número catorce en este trofeo. Ha sido un camino largo. Mañana (por hoy) haremos como durante toda la temporada, lucharemos al máximo por lograr un sitio en la final".

Mourinho defiende con serenidad la política de rotaciones que ha aplicado, concediendo prioridad a la Europa League. "La situación es simple, diecisiete partidos en siete semanas con dieciséis jugadores es imposible. No ha sido una apuesta, ha sido una decisión sencilla, basada en el sentido común", argumenta. "Desde el momento en que perdimos jugadores titulares en una semana, a Smalling y Jones con la selección nacional y a Rojo y Zlatan ante el Anderletch, y antes ya habíamos perdido a buenas alternativas como Young o Ash, el trabajo se convirtió en imposible. Ahora estamos en esta situación y debemos pelear por ello. Veremos si somos capaces de conseguirlo y meternos en la final. Pero no importa lo que suceda, no habrá remordimientos. Todos estamos dando el máximo, los jugadores, yo y todos los que están alrededor del equipo", advierte.

El luso niega que el Celta acuda a la cita con mayor motivación debido a la condición de cita única en la existencia del club vigués. "Para el Celta, en sus palabras, es el partido más importante de su historia. En mis sentimientos es también el partido más importante de nuestra historia", reflexiona. "No importa lo que sucedió antes, qué grandes partidos hemos jugado. Lo que importa es el próximo partido, que es mañana. No creo que el Celta sueñe más que nosotros, que lo desee más que nosotros. No habrá diferencias en eso".

Aunque la jefa de prensa avisa que no pueden hacerse preguntas que no estén relacionadas con el partido, Mourinho acepta valorar cómo ha afectado a Pogba que se haya revelado que su traspaso se eleva de 105 a 125 millones de euros debido a comisiones de su agente. "La cuestión es sencilla. No ha tenido ningún efecto", replica.

"Ganaremos si Old Trafford quiere que ganemos", comentó Mourinho, elogioso con el ambiente de Balaídos, tras el partido de ida. Le preguntan al respecto. "Veo diferencias entre partidos. No hay una atmósfera consistente, un entusiasmo constante. Pude sentirlo ante el Chelsea, un partido que (los aficionados) querían jugar desde el primer minuto y que jugaron hasta el último minuto. Fue un Old Trafford muy fuerte. Hubo otros partidos, como ante el Anderletch, donde el estadio no fue suficientemente caliente a la hora de hacernos sentir que era un partido importante para nosotros. Y lo era, la vuelta de cuartos de final. Espero que mañana tengamos la sensación de que es la vuelta de las semifinales y más que eso, que es la final. Tendremos que luchar con fuerza".

Sin sitio para la sorpresa

Berizzo ha anticipado que puede reconsiderar la ubicación táctica de Aspas. Pero a Mourinho no le inquieta. "Lo que sé es lo que he visto en sus partidos durante la temporada y ante nosotros. He visto a Aspas jugar desde la derecha, he visto a Aspas como nueve y he visto a Aspas jugar detrás de Guidetti. A no ser que Aspas juegue de centrocampista central o de lateral izquierdo, nada será una sorpresa. Son partidos tan importantes que nos metemos en ello con todo lo que tenemos. Miras un partido, dos, tres, cuatro? Buscas toda la información posible que te pueda ayudar. Pero para mí, más importante que la posición de los jugadores e incluso su sistema táctico, son los principios del juego, cómo intentan jugar normalmente. Y eso no cambia mucho", analiza.

Al United le presiona la certeza de que volverá a quedarse fuera del mayor torneo continental si no gana el menor. "Si no nos clasificamos para la Champions League es porque no somos suficientemente buenos para jugar la Champions League. Intento verlo de una forma pragmática", declara Mourinho. "Obviamente para el prestigio del club la Champions es la Champions, también por el aspecto financiero, para los jugadores y para mí, pero si no estás ahí es porque no eres suficientemente bueno. Si mañana quedamos eliminados y la próxima temporada volvemos a jugar la Europa League, quizás es el paso que necesitamos para mejorar. Si somos suficientemente fuertes para pasar a la final y ganarla, la Champions es la competición en la que queremos estar. Pero ahora estamos centrados en donde estamos. No existe más motivación que intentar ganar mañana".

Al entrenador no le preocupa que a su plantilla le pueda despistar el 0-1 de Vigo. Se ha cuidado de evitarlo "trabajando fuerte, que es lo que hemos hecho desde el pasado lunes; respetando al rival y haciéndoselo sentir a los jugadores; preparándolos para cualquier escenario; intentar fijarnos en cualquier posible detalle. Eso muestra la seriedad del asunto a los jugadores". Mourinho acepta: "Es diferente jugar para estar entre los cuatro primeros de la Liga que para ganar una competición europea, incluso para mí, honestamente. La diferencia entre ser cuarto y quinto está en la Champions, pero no hay trofeo, no hay título, no hay prestigio, no existe nada. Otra cosa es jugar para ganar un título que además te da el bonus de jugar la Champions. Pero en este momento no pensamos en la Champions, pensamos en la posibilidad de ganar un título y disputar la Supercopa de Europa contra un gran club".