El Celta quiere escribir esta noche en Old Trafford (21.05, Bein Sports) la página más hermosa de sus noventa y cuatro años de vida ante el equipo más rico del mundo y que parte con el gol de ventaja que Rashford marcó la semana pasada en Balaídos. Sin embargo, en el "Teatro de los sueños" todo es posible, como ayer se encargaron de recordarle a Eduardo Berizzo en la rueda de prensa que ofreció en Mánchester y en la que el técnico argentino se esforzó en esconder sus planes, tal y como hizo minutos antes su homólogo, José Mourinho, quien también calificó el duelo como el más importante de la historia de los "Red Devils". La guerra psicológica no quiere darse por perdida de antemano, aunque nadie se crea las palabras del técnico portugués, que no tendrá disculpas si su equipo, plagado de estrellas y con tres Copa de Europa se despide esta noche de este torneo, lo que que también le dejaría fuera de la Liga de Campeones por segunda temporada consecutiva.
Mourinho incluso apeló al apoyo de la afición local para superar la prueba. El Celta tiene asegurado el apoyo de los alrededor de 2.600 aficionados que hoy acudirán a Old Trafford. Además de los "400.000 que se quedaron en Vigo", según Berizzo.
El técnico se ha llevado a toda la plantilla a Inglaterra, aunque el equipo titular será el mismo o parecido al que del jueves pasado. El Celta necesita alguna modificación táctica para evitar la confrontación directa contra un rival con un poderío físico descomunal, con el que fundamentó su victoria en el partido de ida. Pogba y Fellaini, dos futbolistas que rozan los dos metros de altura, impusieron su ley en la sala de máquinas. Los célticos fueron neutralizados, quedaron maniatados para manejarse en ataque. Solo Pione Sisto, en una pelea titánica con Valencia, tuvo cierta presencia en el juego. Aspas y Guidetti apenas aparecieron en escena.
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Esta noche, el Celta necesitará de sus delanteros para pasar la eliminatoria ante un rival que solo ha perdido un partido en casa en toda la temporada. Fue precisamente ante otro equipo celeste: el Manchester City, en el derbi de una ciudad en la que el equipo de Nolito es el que más seguidores registra. El United se siente forastero en su tierra, pero su poder en el resto del mundo lo convierte en un club que pelea con Real Madrid o Barcelona por la supremacía del planeta fútbol.
A ese coloso intentará tumbar un Celta que apela a su reciente historia europea, cuando a finales de la década de los noventa del siglo pasado logró eliminar al Aston Villa, líder entonces de la Premier, tras remontar el 0-1 de Balaídos con una victoria heroica por 1-3. Y ese Celta de Víctor Fernández también ganó en Anfield.
Pero eso es pasado. El presente del Celta pasa por repetir esta noche actuaciones recientes como la del Bernabéu en la Copa (1-2) y las tres victorias consecutivas fuera de casa en la Europa League ante el Panathinaikos, el Shakhtar y el Krasnodar.
Mourinho y Berizzo apostarán seguramente por el mismo once que presentaron la semana pasada en Balaídos, pues el pasado fin de semana reservaron a muchos titulares en sus respectivos compromisos de liga.
El Celta, con la única baja del lesionado Rossi -el italoestadounidense formó parte del United-, presentará su equipo de gala, con Sergio Álvarez en la portería. Mallo y Jonny serán los laterales. Cabral estará acompañado en el eje de la zaga por Roncaglia o por Fontás. El centro del campo está reservado para Radoja, Hernández y Wass, aunque no se descarta la presencia de Jozabed para conseguir mayor control del balón.
En ataque, Aspas y Pione ocuparán las bandas, con Guidetti como delantero centro. La posición de Aspas, como segundo delantero, por detrás del sueco, es otra de las alternativas que podría entener en cuenta el técnico argentino para darle más profundidad a un Celta que necesita marcar. Lo consiguió en todos los desplazamientos europeos que realizó este curso. Necesitará ganar por uno de diferencia a un Manchester United que jugará con Romero en la portería. Valencia, Baill, Blind y Darmian en defensa. Herrera, Fellaini y Pogba, en el centro del campo. Rashford, Mkhitaryan y Lingard, en ataque.
