El Celta ya prepara el asalto a las semifinales de la Europa League. Tras el triunfo en Los Cármenes, donde la segunda unidad recuperó el ritmo en el campeonato nacional de Liga, la plantilla se entrenó esta tarde en las instalaciones de A Madroa con la vista puesta en el choque europeo del jueves en Genk.

Berizzo dispondrá para el histórico choque continental con toda la artillería pesada tras dejar en casa o en el banquillo el pasado domingo a buena parte de sus titulares. Hasta diez de los no habituales supieron defender el pabellón en la conquista de Granada. En el choque de ida de los cuartos de final de la Europa League el conjunto vigués se juega la que sería su primera participación en unas semifinales europeas.

El ambiente esta tarde en las instalaciones de A Madroa reflejaba,a setenta y dos horas del choque, optimismo a raudales. Los que jugaron ayer realizaron un entrenamiento suave. El resto se entrenó con normalidad.

El técnico tiene disponible a toda la plantilla a toda la plantilla, excepto al guardameta Rubén Blanco y al delantero Giuseppe Rossi, que será operado el jueves en Dallas, intervención en la que estará acompañado por el jefe de los servicios médicos del Celta, Juan José García Cota, que el miércoles viajará a Estados Unidos.