Eduardo Berizzo consideró "injusta" la derrota de su equipo ante el Villarreal (0-1), un rival que, a su juicio, tuvo que quedarse con un hombre menos por la dura entrada de Roberto Soldado a Marcelo Díaz, que Melero López sólo castigó con tarjeta amarilla.

"Viendo la entrada de Soldado era una jugada de roja directa. En el momento de la acción ya me pareció una acción violenta y después lo confirmé", afirmó en rueda de prensa el técnico argentino, quien mostró su alegría por la respuesta de su equipo a pesar de que sólo repitieron cuatro titulares del partido ante el Krasnodar.

"El resultado nos quita mucho del mérito que acumulamos durante el trámite del partido. Recibimos un gol que nada tuvo que ver con lo que estaba sucediendo en la cancha. Jugamos el partido que habíamos imaginado, protagonizándolo y sometiendo a un gran rival como el Villarreal. Los menos habituales brindaron un partido muy bueno", explicó.

A pesar de la derrota, Berizzo no descarta al Celta de la pelea por Europa: "Está claro que se ha abierto una brecha importante con los puestos europeos pero creo esto va a ser una carrera hasta el final. Hay que recuperarse de esta derrota porque el jueves tenemos un encuentro importante en Rusia y después llega el derbi".