Pablo Hernández se perderá seguramente el tercer partido consecutivo de la temporada. Tanto los médicos como el entrenador del Celta consideran muy improbable que el centrocampista argentino con pasaporte chileno pueda recuperarse a tiempo de la micro-rotura fibrilar que sufre en el sóleo derecho para enfrentarse el jueves al Krasnodar ruso (Balaídos, 21.05 horas), en el partido de ida de los octavos de final de la UEFA Europa League (UEL). "El Tucu"tampoco pudo entrenar ayer con la plantilla céltica, después de causar baja en las dos últimas citas ligueras, en las que el conjunto vigués se enfrentó al Espanyol y al Barcelona.

El internacional chileno se ha perdido ocho de los 41 partidos que suma el Celta en lo que va de temporada -8 de UEL, 8 de Copa y 25 de Liga-. Durante esas ausencias del tucumano, Eduardo Berizzo se decantó por diferentes opciones. La más repetida fue la de juntar a Marcelo Díaz, Nemanja Radoja y Daniel Wass en el centro del campo. Sin embargo, en la visita del sábado al Camp Nou, el técnico argentino se decantó por utilizar el "doble lateral", con Facundo Roncaglia en el costado derecho de la zaga y Hugo Mallo por delante, ejerciendo como interior. Esa misma fórmula la empleó Berizzo diez días antes en Ucrania, donde sí jugó Hernández.

Ese día, el Celta realizó un gran partido y superó una eliminatoria que afrontaba con desventaja tras perder por 0-1 en Balaídos. Con el "doble lateral", Berizzo buscaba descargar a Aspas de responsabilidades defensivas por el costado derecho y que dedicase un mayor esfuerzo en el juego creativo y de ataque, juntarse a Guidetti y alternando posiciones con el delantero, además de moverse en la mediapunta.

En el siguiente compromiso de los célticos, Hernández jugó los últimos veinticinco minutos del partido de El Molinón. Días después, volvió a caer lesionado. Los médicos le diagnosticaron una lesión en el sóleo y ya no ha vuelto a jugar.

Ayer, el jefe de los servicios médicos del Celta explicó el alcance de la lesión de Hernández. "El Tucu tuvo una molestia en la parte posterior de la pierna derecha. Le hicimos una ecografía y le diagnosticamos una elongación. Veinticuatro horas después el edema había aumentado mucho y las pruebas que le volvimos a realizar confirmaron que tenía una lesión estructural del sóleo, una rotura de bajo grado que nos obliga a pararlo", explicó Juan José García Cota, quien considera que el centrocampista cuenta con pocas opciones de reaparecer el jueves ante el Krasnodar: "Iremos viendo en el día a día cómo evoluciona, pero tenemos dudas de que pueda jugar. El miércoles repetiremos la ecografía, pero está complicado que llegue".

Su ausencia ante el Espanyol la resolvió Berizzo reuniendo de nuevo a Wass, Marcelo Díaz y Radoja en la medular, con el danés escorándose a la banda derecha en muchas ocasiones y permitiendo que Aspas se moviese en la media punta. Sin ataduras defensivas, la estrella del Celta brilla más, como ha ocurrido en sus últimas actuaciones, tras unas semanas sin encontrar portería, en las que su traslado a la banda derecha le alejaba de la portería rival.

Sin poder recuperar a Hernández para el Camp Nou, Berizzo quiso repetir la fórmula que tan buenos resultados le había dado en Ucrania. El sábado pasado ante el Barcelona, Marcelo Díaz se quedó en el banquillo. En su lugar entró Mallo, que inició el partido por delante de Roncaglia, situado en el lateral derecho. El argentino se vio desbordado por Neymar en las primeras jugadas del partido. Berizzo tardó ocho minutos en modificar el dibujo táctico: retrasó a Mallo al lateral y resituó a Roncaglia como tercer central, encargándole a Cabral la vigilancia de Messi.

El Celta no encontró el balón ante un rival que le superó en todas las facetas del juego. El "doble lateral" puede quedar en el olvido tras la mala experiencia en el Camp Nou. En un centro del campo con tres futbolistas, Wass se presenta como la opción más fiable para que Aspas conserve su libertad, pues el danés está acostumbrado a moverse en ese cuadrante del campo, entre la línea lateral y el centro, sujetando las posibles subidas del lateral y ayudando a sus otros dos compañeros en la medular. Así, Aspas y Guidetti pueden moverse con mayor soltura por el frente del ataque.

Otra de las alternativas de Berizzo es incluir en el once a Jozabed Sánchez, el mediapunta más puro que tiene el Celta en su actual plantilla. El andaluz, sin embargo, no cuenta todavía para el entrenador desde los inicios de los partidos. Quizás le falte fuerza para afrontar el desgaste físico que exige el preparador argentino a sus centrocampistas. Si optase por Jozabed, Marcelo Díaz se iría al banquillo.

En los ocho partidos que no ha jugado Pablo Hernández, el Celta contabiliza tres victorias, dos empates y tres derrotas (incluidas las dos goleadas ante el Villarreal y el Barcelona).

Ante el Krasnodar, el internacional chileno será muy probablemente baja, al igual que Rubén Blanco. El cancerbero prolongará su ausencia por dos o tres semanas, según señaló ayer el jefe médico del club. "Por lo menos dos o tres semanas vamos a tener que dejarlo fuera de las convocatorias", dijo García Cota, al recordar que Blanco ha recaído de una lesión que sufrió hace un mes en el recto anterior del muslo derecho. El portero se resintió tras el partido ante el Espanyol. "En ese partido contabilizamos que efectuó 28 golpeos de larga distancia con la pierna derecha y se ha resentido de la cicatriz que tuvo hace un mes", indicó el médico.

En la sesión de entrenamiento de ayer tampoco participó Radoja. El serbio se ausentó, según García Cota, "porque periódicamente se está sometiendo a un tratamiento en la rodilla con factores de crecimiento para solventar las molestias que arrastra por momentos en la zona de inserción de un tendón de la rótula". Esos problemas no le impedirán a Radoja jugar el jueves, subrayó el médico del Celta, quien también destacó las buenas sensaciones de Claudio Beauvue tras reaparecer de la grave lesión en el tendón de Aquiles. Es más, García Cota ya ve apto al guadalupeño para afrontar un partido completo, "sin restricciones".