El Celta ha comenzado a preparar el partido del jueves ante el Krasnodar (Balaídos, 21.05 horas) con la atención puesta en la evolución de las lesiones que sufren el portero Rubén Blanco y el centrocampista Pablo Hernández. Ninguno de los dos estará posiblemente en este duelo de ida de los octavos de final de la UEFA Europa League, como esta mañana reconocieron tanto el entrenador del Celta, Eduardo Berizzo, como el jefe de los servicios médicos del club, Juan José García Cota.

"El Tucu [Hernández] sufre molestias en la parte posterior de la pierna derecha. Le hicimos una ecografía y le diagnosticamos una elongación. Veinticuatro horas después el edema había aumentado mucho y la resonancia confirmó que tenía una lesión estructural del sóleo, una rotura de bajo grado y de buen pronóstico que nos obliga a pararlo. En teoría es una lesión de diez a doce días de curación y de cara al jueves tenemos dudas de cómo va a estar. Está complicado que pueda jugar", reconoció esta mañana García Cota en la sala de prensa de A Madroa antes de señalar que el miércoles se le realizará otra ecografía al tucumano, a quien Berizzo busca sustituto para el duelo ante el conjunto ruso.

Tampoco reaparecerá el jueves el guardameta Rubén Blanco, que tras el partido contra el Espanyol recayó de la lesión que sufrió "hace poco más de un mes en el recto anterior derecho. Eso nos ha obligado a pararlo un tiempo. Lo tomamos como una recaída de la lesión anterior y por eso vamos a tener que ser mucho más cautos en su vuelta a la competición", explicó García Cota, quien calcula que el mosense permanecerá entre "dos y tres semanas fuera de las convocatorias".

El resto de la plantilla se encuentra a disposición de Berizzo, aunque Radoja necesita cuidados en una rodilla, "donde le aplicamos factores de crecimiento periódicamente. Hoy le tocó y por eso no entrenó. Ese tratamiento se lo hacemos porque sufre unas molestias que dependen de una zona de inserción de un tendón en la rótula. Pasa temporadas sin ningún problema, pero de vez en cuando le molesta y entonces le hacemos ese tratamiento", indicó el jefe médico del Celta sobre el centrocampista serbio.

El resto de la plantilla reanudó los entrenamientos en A Madroa tras recibir la visita del presidente de la AFE, Luis Rubiales, "para darnos una charla informativa, nada relevante", señaló Sergi Gómez. El zaguero catalán señaló que equipo trata de olvidar la goleada sufrida en el Camp Nou y afrontar con optimismo los octavos de final de la UEL ante el Krasnodar. "Somos suficientemente maduros para saber lo que hicimos mal el sábado, para dejarlo de lado y pensar en lo que viene, que pienso que es mucho más importante que lamentarse de cosas malas que hicimos contra el Barcelona", indicó Gómez.

"Le hemos dado vueltas a lo que hicimos en el Camp Nou, donde no jugamos nuestro mejor partido. Ellos estuvieron a un nivel muy alto y cuando sus tres jugadores de ataque están al nivel que estuvieron es muy complicado pararles, pero tampoco sirve de excusa. No estuvimos a la altura", comentó Sergi Gómez sobre la goleada sufrida el sábado ante el Barcelona.

El central del Celta espera que el equipo vigués no se confíe en la eliminatoria ante el Krasnodar tras superar a un rival tan complicado como el Shakhtar Donetsk y para ello espera que les sirva la experiencia que tuvieron en Copa, donde les eliminó el Alavés tras superar al Real Real Madrid. "Eso nos tiene que servir de aviso. Cualquier rival en Europa es muy potente, tenga el nombre que tenga y tenemos que estar con todas las alarmas encendidas para competir en los dos partidos a muy buen nivel", añadió.