Vivía con otros sacerdotes desde hace algunos años, en la Residencia Sacerdotal "Nosa Señora da Guía", con la continuada y fraternal compañía de su hermano Mons. Ramón R. Otero. Ayer, discretamente, como en todo tiempo, se apagó la vela de todos sus anhelos y afanes sacerdotales que fue la misma que la de sus muchas curiosidades intelectuales.

Había nacido en Ponteareas hace casi 90 años, que cumpliría en el próximo febrero y, además de los estudios eclesiásticos de Filosofía y Teología, era Graduado Social por la Escuela Social de Santiago de Compostela y Licenciado en Filosofía y Letras rama de Historia, por la Universidad compostelana. Después de su ordenación sacerdotal en Tui, en junio de 1951, fue sucesivamente coadjutor de la parroquia de Arcade, luego de la de Donas y encargado de Pinzás, hasta que en 1953 fue nombrado párroco de Taboexa. En 1964 es trasladado como Ecónomo a Cabral, siendo al año siguiente designado Consiliario del Apostolado Rural de la Acción Católica. Asentado en Vigo tuvo gran repercusión e influjo su dedicación sacerdotal a las asociaciones sindicales y obreras y de hecho fue el primer director de la revista "Galicia Social" y uno de los fundadores de la entonces muy activa asociación cultural del mismo nombre. En 1969 se le nombra Asesor Eclesiástico Provincial de los sindicatos y desde ese mismo año sería también capellán de la comunidad y del Colegio "Amor de Dios" y desde 1971 y a la vez, profesor de religión del Colegio de las Jesuitinas. Don Ramón tuvo mucha relación y prestigio entre las gentes de la enseñanza y entre los pequeños y grandes investigadores de la historia sencilla de nuestros pueblos.

Entre otros muchos encargos ejerció también como Delegado diocesano de Migraciones (1970) y desde 1996 como Delegado Diocesano de Relaciones Interconfesionales. Fue miembro del Colegio de Consultores (1998) y desde 2001 era canónigo de la S. I. Catedral de Tui-Vigo

Investigador constante, como queda dicho, escribió numerosos artículos y pequeños folletos sobre la historia particular de algunas zonas de la diócesis, especialmente de O Condado.

Sus restos están en el Tanatorio de Emorvisa desde donde serán trasladados el domingo día 26 para la celebración de una misa (17 horas) en la parroquial de san Miguel de Ponteareas en cuyo Cementerio Municipal serán enterrados. El lunes próximo a las cinco de la tarde se celebrará el funeral en la villa del Tea y el jueves día 30, a las 11 de la mañana, el Cabildo Catedralicio ofrecerá un funeral por su eterno descanso en la Catedral de Tui. Descanse en paz el que amó con amor inquebrantable a su tierra, a sus gentes y su Dios.

*Sacerdote y periodista