La cocina de Galicia la encontramos en la Festa do Marisco donde podemos degustar los manjares de nuestras rías, pero si recorremos las estrechas calles de O Grove, descubriremos pequeños restaurantes con una gran cocina, donde la fiesta se prolongará durante todo el año.

En esta edición se tomaron medidas de seguridad, colocando bloques de granito en puntos estratégicos para evitar esos atentados tan conocidos, siendo muy valorados por los visitantes.

La Festa do Marisco sigue creciendo en popularidad y cada vez atrae más visitantes. En estas LIV ediciones, creo que los españoles han crecido en altura algunos centímetros, pero las mesas de la gran carpa (comedor) siguen siendo las mismas. Han crecido en cantidad pero no en altura.

Nos hemos dado cuenta que algunos comensales tenían molestias en su espalda por la baja altura de las mesas. Si en los hogares las cocinas modernas son más altas, de esto saben mucho los profesionales. Las mesas de la gran carpa tendrían que ser también más altas, pues se come de pie y no sentado.

Acudir a la gran fiesta gastronómica del mar para degustar los manjares de Neptuno y regresar con un dolor de espalda, no es la mejor forma de agradecer las visitas de los miles de comensales.