En ninguna parte de Galicia es la confianza tan baja como en Vilagarcía de Arousa. Este concello esta formado por la fusión de Vilaxoán y Carril, pero estos lugares siempre mantuvieron y mantienen su propia identidad y además son muy sensibles a todo aquello que la quiera aguar. El sentido de la identidad es más fuerte en Carril y Vilaxoán que en Vilagarcía. Pienso que los conflictos creados por el señor alcalde, se deben a la falta de conocimientos de nuestra identidad, perdiendo por lo tanto la confianza de sus vecinos. Que trate de chantajear y amenazar con suspender la Festa da Ameixa do Carril en su 25 edición y además de Interés Turístico, es un ejemplo de la falta de conocimientos que tiene sobre su concello. Los carrilexos no son tomados en serio, sus demandas las ven como críticas de los críticos. Si el padre del concello desconfía de sus ciudadanos, nunca podrá conseguir la confianza para asegurarse otra legislatura. Creemos que la confianza crece con sentimientos positivos, escuchando a los ciudadanos para tratar de solucionar sus problemas. Las amenazas y chantajes deben de desaparecer, pues el punto de partida debe ser siempre la confianza.

Para algunos es muy difícil de comprender, parece que se escapa cuando tratan de interpretarla. La política va sobre intereses y compromisos pero la identidad que poseemos es innegociable.