Los Mossos d'Esquadra culminó una operación iniciada hace cinco años que permitió detener a un hombre que se hacía pasar por un falso revisor del gas y cometía hurtos y robos con violencia en domicilios de personas de edad avanzada y cuyo botín supera los 160.000 euros.

El hombre, de 44 años y nacionalidad española, había aprovechado un permiso carcelario para no ingresar en prisión, donde cumplía condena por el mismo delito. Según informaron ayer los Mossos, el operativo acabó el pasado día 22 de junio en Getafe (Madrid) con la detención de este hombre.

La investigación se remonta al año 2012 cuando los Mossos tuvieron constancia de que un hombre se dedicaba a entrar en domicilios particulares de personas mayores haciéndose pasar por operativo del gas para sustraer dinero y joyas.

Tras su detención en Algeciras y su ingreso en prisión, el hombre aprovechó un permiso penitenciario en el año 2013 para no volver a prisión y evitar cumplir la condena pendiente y retomó su actividad delictiva entre Barcelona y Madrid, utilizando la identidad de su cuñado.