Como cada año, y ya van unos cuantos, acercarse a la Playa de A Ladeira en plena época estival es muy doloroso. Además de ser la más grande de Baiona, forma el final del estuario del río Miño, que se integra en la Red Natura 2000. La Red Natura 2000 es el principal instrumento en materia de conservación de la naturaleza de la política europea. Si nos atenemos a la Ley 42/2007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, entre otras exigencias, se establecen los objetivos de conservación del lugar y las medidas apropiadas para mantener los espacios en un estado de conservación favorable.

Como zona de especial protección de valores naturales (ZEPVN), A Ladeira y sus alrededores aúnan valores de interés natural, cultural, científico, educativo o paisajístico. Pues bien, la especial belleza de esta playa pierde parte de su majestuosidad porque no se asegura su constante conservación.

Hace tiempo que el Concello de Baiona reconocía haber actuado en A Ladeira limpiando las algas acumuladas en el arenal dada "la importancia que tiene su buen estado de cara a los numerosos vecinos y muchos turistas para que puedan disfrutar, entre otros, de este espléndido arenal". ¿Qué ha ocurrido para que dicha actuación no se imponga cada año como una asignatura obligatoria para el bien general de vecinos y turistas?

Un gran arenal que magnifica la escasa atención prestada por cuanto que caminar sobre su fina arena es un ejercicio de valentía suprema al tropezar con palos, restos de maderos y demás elementos no adscritos al genuino interés de conservación. De este modo, A Ladeira siempre estará a remolque entre los arenales de Baiona. Cumplamos como usuarios cívicos con mantenerla limpia pero también exijamos mayor y permanente conservación por ser un interés natural a cuidar para solaz disfrute de todos los vecinos y turistas. Si esto se asume y se cumple, A Ladeira podrá conseguir la deseada bandera azul.